El exceso de pasado, la depresión – Parte 2
Por: Carlos Amarillo
La sed en la Biblia, es el símbolo de la necesidad interior del hombre, por estar conectado vitalmente con Dios, mientras que el ser humano no se vincule adecuadamente con Dios a través del Señor Jesucristo, manifestará este estado de insatisfacción, y buscará calmar su sed con todo tipo de aguas, cuando no descubre al verdadero Dios. Esa agua contaminada lo seda, lo anestesia y finalmente lo termina matando.
En estos días al levantarme, leí en uno de los diarios digitales acerca del ex vocalista del conjunto Ráfaga, una banda de la movida tropical (Cumbia), que es muy conocida en muchos países del mundo; allí contaba que había dejado el alcohol (whiskey) y que había tenido varios intentos de suicidio, un muchacho que tiene un poco más de treinta años y se llama Rodrigo Tapari, oriundo de Monte Grande, el gran Buenos Aires de un origen muy humilde.
La vida de este muchacho ilustra el bramido del siervo del Salmo 42 (Y es lo que nos pasa a cada persona cuando estamos lejos de Dios), él se convirtió hace 4 años, él es el compositor o autor de la cumbia más escuchada en el mundo (152 millones de personas), cuyo título es Cerveza, donde hace una apología del alcohol, retratando su propia vida cuando no tenía a Cristo y su sed era apagada por la bebida y la infidelidad, pero él encontró a Cristo, su vida cambió y se casó con la mujer de toda la vida, con la cual tienen una niña, y hoy está en una iglesia del gran Buenos Aires (Centro Familiar Cristiano), y su testimonio, como en nuestro medio hay violenta cristianofobia no es muy conocida, pero fue a google y pude leer más sobre su vida cambiada en diarios de Perú y Chile, y lo vi cantar canciones a nuestro Dios, y hace un tiempo que dejó Ráfaga por razones obvias. Adjunto video de Rodrigo.
Podemos dividir al Salmo 42-43 en tres partes bien diferenciadas.
Primera sección: Mirarse a sí mismo, Salmo 42:1-5. Explicada en la primera parte.
Segunda sección: Mirar al Señor, Salmo 42:6-11, y ahora se confiesa a Dios, sigue deprimido, pero ahora, lo que hace es mirar a Dios. Salmos 42:6 “Dios mío, mi alma está abatida en mí”; sigo deprimido, pero antes me acordaba de mí y ahora me acordare de Ti desde donde estoy, desde el Jordán.
“Me acordaré, por tanto, de ti desde la tierra del Jordán, Y de los hermonitas, desde el monte de Mizar” Y desde donde estoy desterrado y por mi culpa, no me justifico y no le echo la culpa a nadie, mucho menos a Dios, por eso soporto lo que se me viene encima.
Salmos 42:6 Geografía. Hermonitas son los que viven en el monte Hermón. Mizar significa el más pequeño de esa cordillera. La tierra del Jordán: Cordillera que se extiende al este del río Jordán, llamada Perea en el Nuevo Testamento, hoy Cordillera Anti Líbano, y donde se refugió Jesús cuando los líderes religiosos de Jerusalén deseaban matarlo.
El Río Jordán es llamado el Rio de la muerte, Jordán literalmente significa descenso y juzgamiento, comienza en el monte Hermón, a casi 3000 metros sobre el nivel del mar, y desciende por un tortuoso camino hacia el Mar Muerto, el Mar Muerto está a casi 450 metros por debajo del nivel del mar. El Río Jordán fluye hacia el Mar Muerto para no volver a aparecer.
Así que en la tipología bíblica Jordán ha sido la representación de la muerte y la desesperación. Y el salmista siente que las aguas están sobre él, está cubierto de problemas, y no sabe dónde dirigirse y está abrumado por las circunstancias. Usa la geografía para ilustrar el contraste, y dar a conocer su depresión. Desde lo más alto a lo más bajo.
Si estás viviendo algo de estas experiencias, rehúsate el estar rumiando, tal vez estás siendo perseguido por el fantasma de tu culpa, ¿Qué hacer? Confesá tu pecado a Dios, si tenés que pedir perdón a alguien, hacelo, y si tiene que restituir algo hacelo, mientras más te demorés el hacerlo, hacé lo que tengás que hacer ya, y cerrá la puerta de ese pasado. Luego de hacer un análisis íntimo de tu corazón, mirá hacia arriba una vez que has identificado el problema. Warren Wirsby fue un gran maestro bíblico dijo que: “La vida no es un problema que debe ser resuelto, sino un misterio que debe ser vivido”.
Salmos 42:7 “Un abismo llama a otro a la voz de tus cascadas; Todas tus ondas y tus olas han pasado sobre mí”. Al principio el agua es vida para el sediento, en esta segunda parte, agua es inundación y muerte. Yo sé que esto que me pasa es por mi culpa, pero precisamente, por no justificarme y por no echarle la culpa a nadie. El libro de Jonás tiene una expresión muy parecida, en Jonás 2:3 “Me echaste a lo profundo, en medio de los mares, Y me rodeó la corriente; Todas tus ondas y tus olas pasaron sobre mí”.
Salmos 42:8 “Pero de día mandará Jehová su misericordia, Y de noche su cántico estará conmigo, Y mi oración al Dios de mi vida”. Este hombre sigue entendiendo cada vez mejor lo que le está pasando, por eso vuelve a reaccionar correctamente. Este salmo no es la canción de gozo, pues no siente una esperanza jubilosa. Él está buscando esta esperanza que trae gozo. Esta es una canción con súplica, una canción al “Dios de mi vida”. Es decir, una canción que ruega a Dios por su vida. ¿Qué debemos hacer? Cantar: Colosenses 3:16 “La palabra de Cristo more en abundancia en vosotros, enseñándoos y exhortándoos unos a otros en toda sabiduría, cantando con gracia en vuestros corazones al Señor con salmos e himnos y cánticos espirituales”.
Salmo 42:9 responde a las circunstancias al preguntarle a Dios: ¿Por qué? 9: «Diré a Dios: Roca mía, ¿por qué te has olvidado de mí? ¿Por qué andaré yo enlutado por la opresión del enemigo?». La palabra “olvidado” es una exageración. Y él lo sabe. En el verso 8 dice: “De día mandará el Señor su misericordia, y de noche su cántico estará conmigo”.
Lo que él quiere decir es que “parece como si Dios se hubiera olvidado de mí”. Se siente como si Dios se hubiera olvidado de él. Si Dios no se ha olvidado, ¿por qué no son sus enemigos repelidos y consumidos? Son las palabras de un hombre desesperado, y Job lo dice así: Job 6:26 “¿Pensáis censurar palabras, y los discursos de un desesperado, que son como el viento?” Eclesiastés 7:21 “Tampoco apliques tu corazón a todas las cosas que se hablan, para que no oigas a tu siervo cuando dice mal de ti”. Isaías 49:15-16, esculpidos somos.
En otras palabras, no salten sobre las palabras de un desesperado. Déjenlo ir. Habrá bastante tiempo para discernir las convicciones más profundas del corazón. Dejen que el viento se las lleve.
Así que el salmista pregunta: ¿Por qué? Es una pregunta legítima. Quizás no hizo una pregunta precisa teológica o lingüísticamente, pero si con el tiempo demuestra que no quiso decir que Dios le había abandonado, dejaremos esas palabras para el viento.
Salmo 42:11 “¿Por qué te abates, oh alma mía, Y por qué te turbas dentro de mí? Espera en Dios; porque aún he de alabarle, Salvación mía y Dios mío” Alabanza: Temas fundamentales en la alabanza de Dios eran su amor, su poder, su justicia, su santidad, su misericordia, su gracia, su palabra. El culto era un acto alegre y la atmósfera festiva del templo se recoge en este Salmo, que habla de la “multitud gozosa, canto y gritos de alabanza a Dios”, expresada por medio de oraciones, sacrificios y ofrendas.
Tercera sección: Apoyarse en Dios, que es el Salmo 43, y ahora empieza a ver la victoria en el apoyándose en El: “Júzgame, oh Dios, y defiende mi causa; Líbrame de gente impía, y del hombre engañoso e inicuo”. Ya no me apoyo en mí, ahora me apoyo en Ti, 2 Pues que tú eres el Dios de mi fortaleza, ¿por qué me has desechado? ¿Por qué andaré enlutado por la opresión del enemigo? 3 Envía tu luz y tu verdad; éstas me guiarán; Me conducirán a tu santo monte, Y a tus moradas. 4 Entraré al altar de Dios, Al Dios de mi alegría y de mi gozo; Y te alabaré con arpa, oh Dios, Dios mío. 5 ¿Por qué te abates, oh alma mía, Y por qué te turbas dentro de mí? Espera en Dios; porque aún he de alabarle, Salvación mía y Dios mío”.
Una de las paradojas del evangelio, es que cuando llegamos al punto de morir a uno mismo, uno lo pierde todo y no es así, en realidad no perdemos nada, lo recibimos todo, al morir a mí mismo, el Señor me dio su presencia en mi vida, y con eso me lo regaló todo, me permitió fundar un hogar de su mano, iniciar una familia, me libró de la avaricia, y me regaló el gozo de servirle, y recibí la vida abundante, que es sumar vida a los años y años a la vida, y cuando llegue a estar con él en la eternidad comprobaré que soy coheredero junto con Cristo.
Otras paradojas: Para recibir fuerzas hay que declararse completamente débiles, dejar de confiar en nuestra obra y confiar en la de Dios, (Pasar del Salmo 42 al 43), hay que morir para poder vivir, Jim Elliot el misionero asesinado en Ecuador por los Aucas en 1955, dijo: “No es tonto el que da lo que no puede conservar, para ganar aquello que no puede perder”.
¿Bramas por el agua como la que Dios ofrece y que si no te llega te mueres? Los pozos viejos no sirven tienen agua contaminada. Y nos enferman la vida.
El Salmo 43, continúa la misma composición literaria con el anterior (42) y forma su tercera estrofa. En el primer párrafo (43) el salmista deja de hablar consigo mismo y se dirige a Dios.
1. Clamor a Dios, vv. 1-3
Pide que Dios le vindique, que haga justicia. La nación impía podría ser una nación extranjera, pero también puede ser su nación. En el v. 2 se usa la forma reflexiva de andar; va caminando despacio, reflexionando sobre su condición. El v. 2 es casi igual a Salmo 42:9.
Aquí es luz y… verdad en vez de amor y verdad, pues el salmista pide que Dios las use para conducirlo (en vez de conducirán puede ser “que me conduzcan”). El salmista siempre, en toda situación de angustia o crisis o batalla, reconoce que necesita que Dios guíe sus decisiones.
Salmo 43:4-5 Declaración de confianza, vv. 4, 5. En los Salmos 42 y 43 los sentimientos de desánimo alternan con oraciones y declaraciones cada vez más confiadas. El v. 4 dice: “Entraré al altar de Dios, Al Dios de mi alegría y de mi gozo; Y te alabaré con arpa, oh Dios, Dios mío”, está viviendo lo que espera: La comunión con Dios y con el pueblo de Dios.
De nuevo el estribillo (v. 5) ¿Por qué te abates, oh alma mía…” Indica la reflexión, decisión y fe del salmista. Él es franco consigo mismo y con Dios; reconoce que la comunión con Dios es el sentido supremo del culto. El adorador verdadero no busca lo que puede recibir de Dios sino busca a Dios mismo, agradarle, colaborar con él y compartir su amor.
Reconozcamos algunas características del ser interior:
a. Tenemos debilidades, somos frágiles: Hudson Taylor el gran misionero a la China dijo: “Dios utiliza a hombres que son lo suficientemente débiles y vacilantes como para apoyarse en El”.
Éxodo 3:11 “Entonces Moisés respondió a Dios: ¿Quién soy yo para que vaya a Faraón, y saque de Egipto a los hijos de Israel?”
2 Corintios 12:9-10 “Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. …porque cuando soy débil, entonces soy fuerte”.
Santiago 4:6 “Pero él da mayor gracia. Por esto dice: Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes”.
b. Inclinados a tolerar pequeñas excepciones: Aceptar pequeñas anormalidades o deshonestidades, acariciar pequeños resentimientos, desprecios (porque alguien no hizo lo que yo quería, o que nos criticó), escribe las críticas en el polvo y los elogios en el mármol.
c. Aceptar la mediocridad. Renunciar al anhelo de ser mejor cada día: Stradivarius decía: “No vendería un violín que no estuviese tan cerca de la perfección que la destreza humana pudiera lograr”. Recordar Filipenses 3:17-19.
d. Creernos infalibles: El que piensa estar firme mire que no caiga.
Consejos para mantener saludable el ser interior.
a. Renovación: 2 Corintios 4:16 “Por tanto, no desmayamos; antes aunque este nuestro hombre exterior se va desgastando, el interior no obstante se renueva de día en día”.
Es fácil desmayar. Todos enfrentamos problemas, en nuestras relaciones o en el trabajo, que nos inducen a pensar en echar a un lado las herramientas y abandonarlo todo. Antes que rendirse cuando la persecución arreciaba, Pablo se concentró en experimentar la fortaleza interior proveniente del Espíritu Santo (Efesios 3:16). No permita que la fatiga, el dolor o la crítica lo motive a abandonar la tarea. Renueve su compromiso de servir a Cristo. No renuncie a su recompensa eterna por causa de la intensidad del dolor actual. Su debilidad permite que el poder de la resurrección de Cristo le fortalezca momento a momento.
“Para que os dé, conforme a las riquezas de su gloria, el ser fortalecidos con poder en el hombre interior por su Espíritu”. Efesios 3:16. Metamorfosis: Romanos 12:1-2.
b. Disciplinas espirituales: 1 Corintios 9:24-27. Son los juegos ístmicos, se hacían cada dos años y tenían tres pruebas:
1. Carrera: solo uno se llevaba el premio, en la carrera cristiana todos los que corren bien.
2. Boxeo: golpean el aire, es dar ventaja al derrochar energía, el creyente inmaduro pierde tiempo en trivialidades.
3. Lucha atlética: (golpeo el cuerpo) derribar a tierra. Golpeo el cuerpo y lo pongo en servidumbre. Severo control de nuestros instintos y los sentidos. Para no dejarse llevar o descontrolarse.
c. Disposición a ceder derechos para alcanzar la plenitud. Hay una corriente permanente de gente que “reclama derechos”, hasta vemos en las oraciones, Señor te reclamo, y Dios no tiene libro de reclamos o quejas.
Anhelamos los derechos y evitamos las responsabilidades. Derecho es la facultad que tiene una persona de hacer o exigir todo lo que está “legalmente” a su favor. Abraham cedió sus derechos según Génesis 22 y Jesús en Filipenses 2:5-11.
d. El valor de mantener siempre una buena conciencia. ¿Qué es? La libertad interna del espíritu y la seguridad de saber que se tiene transparencia hacia Dios y los hombres, que no hay nada que esconder, ninguna mancha ni nadie señalándonos con el dedo.
La importancia de tener una buena conciencia:* Amistad con Dios* Éxito en la lucha* Permite decidir correctamente* Libertad de hacer amistades profundas.* Gozo de poseerla.
¿Sabés que es muy difícil animar a una persona con depresión? Parece que nada le hace sentir mejor. La depresión es un problema serio.
Ejemplo para concluir: La vida de Jacob
Quien como el Salmista del S 42 y 42 luchó contra su auto suficiencia y terminó apoyado en su Dios. Jacob vivió gran parte de su vida apoyado en él y sus mentiras, para finalizar en el encuentro, y lucha con Dios y así comenzar a ser Dios dependiente, APOYANDOSE EN EL, y llevó toda su vida la marca en su muslo y caminar con un largo bastón, un bordón.
La sociedad nos dice que debemos aprender a ser autosuficientes, no depender de nadie. La fe en su esencia nos convoca a aprender a depender, como aprender a apoyarse, pero en el Señor. Justo el proceso relatado en los Salmos 42-43. Empezó mal, siendo auto suficiente, mirándose el ombligo, y terminó mirando al Señor y apoyándose en él. Jacob vive gran parte de su vida siendo autosuficiente, pero cuando tuvo un cambio de vida, Dios cambió de nombre y se llamó Israel, justo cuando inicia el proceso de depender, APOYARSE EN Dios.
Hebreos 11:21 tiene una cita precisa de su vida y así de alguna manera resume en pocas palabras una vida de 147 años: “Por la fe, Jacob al morir, bendijo a cada uno de los hijos de José, y adoró apoyado sobre el extremo de su bordón (Bastón)”.
La autosuficiencia no es una virtud, espiritualmente es un vicio malo.
¿Cómo era Jacob? Era dado a la intriga, a la confabulación, manipulador, un ventajero, solo buscaba su beneficio. Pero Dios trabajó en él para que sea el hombre que Dios quiere que sea.
Dios trabaja para que dependamos de él, Filipenses 1:6.
Jacob engañó a su padre, a su hermano Esaú y luego exiliado, el tío era peor que él y lo engañó a él. Esaú el hermano gemelo de Jacob, lo quiere matar, y por veinte años él estuvo aprendiendo a los golpes. Él quiere hacer las paces con su hermano Esaú y regresa a su tierra, porque entiende que no puede estar bien con Dios, hasta que no esté bien con su hermano.
Al regresar al pago, busca tretas para apaciguar a su hermano Esaú, ¿Qué hace? Usa la adulación, le llama señor, le envía un regalo de 580 animales, una fortuna, y también divide su caravana en partes por si es atacado. Dios usa las circunstancias dolorosas para hacerlo madurar, y deje de depender en él mismo y sea Dios-dependiente. Es el mismo plan para vos. Hay una frase enigmática en Hebreos 11:21 «Por la fe Jacob bendijo a cada uno de los hijos de José y adoró apoyado sobre el extremo de su bordón».
Génesis 32, ayuda a entender.
Dios lo ha protegido durante toda su vida, pero no lo consintió, dejó que experimentara necesidades, escasez y dificultades.
Esaú venía buscando venganza, con un ejército de 400 hombres fuertes, son todos problemas planificados. Jacob es un hombre, fuera de la comunión con Dios, como el salmista del Salmo 42, y está en peligro, Dios lo protege pero no evita que experimente dificultades.
Espera a su hermano y la mente de Jacob comienza a trabajar, a planificar, a conspirar, se maneja como siempre con autosuficiencia.
Génesis 32:3-5, el adulo está tácitamente implorando misericordia.
Génesis 32:6-8, por miedo hizo dos campamentos.
Génesis 32:9-12, ora, Jacob dice: «Oh Dios, cuídame, estoy en problemas», oró como último recurso, aduló a Esaú, dividió sus rebaños, y su gente; y al final se vuelve al Señor.
Génesis 32:13-16, regalará 580 valiosos animales, ¡Que estratega!
Génesis 32:20, trata de aplacar la ira de su hermano.
Y Dios lo deja a Jacob que se consuma en sus propios temores.
Génesis 32:24 dice: «Así se quedó Jacob solo y luchó con él un varón hasta que rayaba el alba». Dios te herirá, pero no te perjudicará. Jacob hizo todo lo que hizo y al final lo encontramos solo. Todos necesitamos momentos de quietud, a solas para pensar y reflexionar y tuvo una confrontación con Dios mismo. En la oscuridad, de pronto alguien salta sobre él y tiene que luchar.
¿Quién era este personaje desconocido? Era Cristo, pre encarnado, (teofanía), ¿Qué quiere hacer? Dios quiere librar a Jacob de su autosuficiencia, y usa la lucha; Un hombre mortal en lucha con el Dios todopoderoso, y al amanecer, sucede algo muy significativo.
Génesis 32:25 “Y cuando el varón vio que no podía con él tocó en el sitio del encaje de su muslo y se descoyuntó el muslo de Jacob, mientras con él luchaba, y dijo: (El ángel) déjame porque raya el alba y Jacob le respondió: No te dejaré sino me bendices”.
Por momentos prevalecía uno, otra vez prevalecía el otro. Era una pelea arreglada. Y en el último round, fue como si el Señor hubiera dicho: Jacob no me gusta lo que te voy a hacer, toca el lugar del encaje del muslo y lo descoyunta, y Jacob no puede seguir luchando. Es el músculo más importante para un luchador, ahí está su fortaleza,
Jacob no puede luchar más y el ángel le dice: Déjame ir, y Jacob le responde: No te dejaré ir sino me bendices. El Señor no quería que lo dejara ir, quería que Jacob valorara su presencia. Si estudias la Biblia, Dios muchas veces Dios actúa como que quisiera alejarse de nosotros, pero es cuando más desea que lo persigamos a Él con todo nuestro corazón, (Los discípulos de Emaús, la mujer siro fenicia), muchas veces Jesús “amaga” a dejarte solo, como para ver tu reacción, y luego desea que te aferres a él.
Dios le arruinó su arma secreta, ¿Cuál era? Correr, no tiene otra esperanza, solo Dios.
Dios lo trajo hasta el punto en donde se diera cuenta que su única esperanza era Dios, no sus intrigas, sino su rendición: “Adoró apoyado sobre el extremo de su bordón».
En su juventud no pudo confiar en Dios ni en sus promesas, y usó el engañó para asegurarse las bendiciones, cuando no tenía necesidad de hacerlo, compró a Esaú lo que ya era de él.
¿Por qué dice que Jacob adoró apoyado en el extremo de su bordón? Veamos:
Dios te protegerá pero no te consentirá, Gén 32:12-2, “Campamento de Dios es este”
Jacob era falto de madurez, y fuera del compañerismo con Dios, y Dios lo protegía.
Génesis 32:24 “Así se quedó Jacob solo; y luchó con él un varón hasta que rayaba el alba”.
Dios te quebrantará, para bendecirte. ¿Cuál es el final de la lucha con el ángel? Génesis 32:27 “Y el varón le dijo”, “¿Cuál es tu nombre? El respondió: Jacob”. ¿Sabías que el nombre Jacob significa: Suplantador, engañador? Hoy sería: Un artista del engaño.
Génesis 32:28 «Y el varón” (o sea el ángel) “le dijo: No se dirá más tu nombre Jacob, sino Israel, porque has luchado con Dios y los hombres y has vencido”.
El nombre Israel significa príncipe, por lo tanto, el ángel le dice: Antes tu nombre significaba artista del engaño, pero ahora tu nombre significa príncipe, porque has luchado con Dios y los hombres y has vencido.
Génesis 32:29 “Entonces Jacob le preguntó, y dijo: Declárame ahora tu nombre. Y el varón respondió: ¿Por qué me preguntas por mi nombre? Y lo bendijo allí. 30 Y llamó Jacob el nombre de aquel lugar Peniel” (el rostro de Dios) “porque dijo: Vi a Dios cara a cara”, Así sabemos con quien luchó Jacob, “Y fue librada mi alma. Y cuando había pasado Peniel, le salió el sol; y cojeaba de su cadera”.
¿Vos crees que Dios no sabía su nombre cuando le preguntó? ¡Sí! Pero, ¿Por qué se lo preguntó? Porque quería que Jacob lo admitiera.
¿Cuál es tu nombre? Mi nombre es: Suplantador, manipulador, artista del engaño. Bien Jacob, me alegro de que lo admitas, ¿Sabías que Dios te puede preguntar a vos lo mismo un día? Dios planificará todo y al encontrarte en el lugar donde Él quiere te va a preguntar: ¿Cuál es tu nombre? Mi nombre es: Ocioso, o incrédulo, o lujurioso, o mentiroso, o egoísta, o depresivo, etc.
¿Cuál es el punto acá? Por decirlo así, Jacob tuvo que ser lisiado para ser príncipe o coronado, tuvo que ser quebrantado para ser bendecido, y deja de tener un nombre vergonzoso, y ahora está en lugar de los hombres ilustres.
PERO OJO: El resto de su vida tuvo que caminar apoyado en un bordón, y cuando le llegó el momento de morir Hebreos 11:21 dice «Jacob adoró apoyado en el extremo de su bordón». Bordón: Bastón de longitud mayor a un hombre y punta de hierro.
A Dios le gustan las cosas rotas, y nosotros tiramos a la basura las cosas rotas, pero Dios nunca usa ninguna cosa que no esté rota, esto es quebrantada. Salmo 51:17 dice: “Al corazón contrito y humillado no despreciarás tú, oh Dios”. Muchos creyentes no son usados por Dios, porque nunca se han quebrantado. Dios quiere que te quebrantes, y seas como pan partido y vino derramado, asi Dios podrá usarle.
Para multiplicar panes y peces, Dios usó el refrigerio de un pequeño muchacho, lo partió y alimentó a multitudes milagrosamente, María rompió el vaso de alabastro para derramar su perfume sobre el Señor Jesucristo, como prueba de su amor.
Jeremías 4:3 dijo: “Arad campo para vosotros y no sembréis entre espinos”. No hay cosecha que debería, sin que se hunda bien el arado y desmenuce la tierra. Aún el Señor Jesucristo al celebrar la Pascua con sus discípulos, tomó el pan y lo repartió a sus discípulos y dijo: «Tomad, comed, este pan esto es mi cuerpo que por vosotros es partido…”
Jacob es un hombre viejo y está muriendo, pero se apoya en su bordón. La mayor parte de su vida estuvo cojeando, la mayor parte de su vida tuvo que usar un bordón, y aun cuando estuvo muriendo, adoró a Dios apoyado en su bordón. AÚN INVÁLIDO, Él FUE MAS FUERTE APOYADO EN SU BORDON, QUE LO QUE HUBIERA SIDO PARADO EN SUS DOS PIES. Para concluir, quiero decirle algunas cosas para que las aplique a su corazón:
¿Cómo Dios resumió la vida de Jacob? Hebreos 11: “Cuando murió…él adoró apoyado en el extremo de su bordón”. Jacob tenía 147 años cuando murió, estaba débil y cansado, pero él pasó sus últimos momentos adorando a Dios. ¡Qué hermosa manera de morir!
Un hombre queriendo agradar a Dios, pensó que conseguiría ese objetivo, volviéndose un ermitaño, y se fue a vivir en una cueva. Un día alguien vino a visitarle, y le preguntó: “¿Sigues luchando con el demonio?”. El ermitaño contestó: “No, ya no, ahora estoy luchando con Dios”. De nuevo le dijo el amigo: “Oh, espero que no tengas la esperanza de ganar”.
El ermitaño respondió: “No, yo espero perder, espero perder”. Y esa es la esperanza que tengo para todos nosotros, que nos inclinemos delante de Él y le digamos: No te dejaré ir hasta que me bendigas. La esperanza incluye inclinarnos delante de él diciéndole: “No te dejaré ir hasta que no me bendigas”.
Bibliografía: Espada electrónica, Comentarios sobre Jacob de El amor que vale.