El nuevo nacimiento trae un nuevo comportamiento
Por: Carlos Amarillo | Temas: Sermones Incómodos
Si el reproductor no funciona podés escuchar el audio siguiendo este link - Descargar audio
Es fácil dibujar una paloma, lo difícil es que abra el pico y coma. ¿Por qué cito este refrán? Porque muchos en muchas ocasiones somos teóricos de las verdades de Dios reveladas en su Palabra, lo que hay que hacer es vivir lo que Dios ordena, sino seremos simples TEORICOS, de allí que es fácil dibujar una paloma (saber la teoría), lo complicado es que abra el pico y hacerla que coma, o sea practicar la fe. Santiago nos va a incomodar porque hablará de la fe en ropas de trabajo, en ropas de fajina, y él mismo da ejemplos muy prácticos acerca de la genuina vida cristiana, no solo lo que decimos, sino en cuanto a lo que hacemos: De no ser oidores de la Palabra, de no creer que la discriminación (Sgo 2) es algo livianito, él va a decir que es tan malo como matar y adulterar, que hay que ayudar a los necesitados (viudas y huérfanos)
Santiago 1:18-20 “El, de su voluntad, nos hizo nacer por la palabra de verdad, para que seamos primicias de sus criaturas. Por esto, mis amados hermanos, todo hombre sea pronto para oír, tardo para hablar, tardo para airarse; 20 porque la ira del hombre no obra la justicia de Dios”, (la ira del hombre nunca es el medio de lograr la verdadera virtud de Dios)
El versículo 18 habla del nuevo nacimiento que cada genuino creyente lo ha experimentado, una de las maneras en la que vos odés darte cuenta si una persona nació de nuevo, es si ves un cambio profundo en la forma en cómo vive,
EL NUEVO NACIMIENTO TRAE UN NUEVO COMPORTAMIENTO.
2 Corintios 5.17 “De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es;”.
Todos necesitamos traducir la Biblia en nuestras acciones diarias, Santiago habla acerca de tres áreas de nuestro comportamiento, son instrucciones que nos da porque somos nacidos de nuevo, veamos el 19:“Por esto, mis amados hermanos, todo hombre sea pronto para oír”, escuche más, “tardo para hablar”, Hable menos “tardo para airarse”; o sea: Enójese menos.
1) Escuche más. Listo para escuchar… lo que Dios tiene que decir, y no cualquier cosa tampoco, hay gente sorda, ya vimos que la sordera en Santiago 1 o escuchan solo lo que les conviene.
Inmundicia (21) es cera de los oídos.
Abundancia de malicia (21): es restos de la vida vieja.
Hay que ser más sensibles. Un hombre le dice a otro: “Mi mujer habla todo el tiempo sola”, él le contesta: ¿ella sabe que está haciendo eso? El otro contesta: “No, ella cree que yo la escucho”.
Ojo que no dice que debemos escuchar todo lo que se dice, hay cosas que no debemos oírlas, en Marcos 4:24, leemos: “Mirad lo que oís”. Tus oídos no deben ser tarros de basura en donde todos tiren sus chismes, y sus habladurías, ni escuchar cada filosofía egoísta y pagana.
“Pronto para oír”, ¿Qué quiere decir? Que hay que ser rápidos para captar el mensaje del Espíritu Santo, en escuchar la Palabra de Dios, en oír la voz de Dios, ¿Estás listo para oír a Dios ahora? Hay mucha gente que no está escuchando, y no es que Dios no esté hablando.
Dios nos habla por lo que habló, habla por medio de su Palabra. ¿Lees la Biblia? ¿Te resulta familiar? ¿Meditás (RUMEAS) en ella? Si alguien dice no, y decís ser cristiano, ¿no es contradictorio que vos quieras conocer la voluntad de Dios, pero no la lees su Palabra ni escuchás su voz? Tengo aquí 5 preguntas que quiero que te las haga a vos mismo a leer la Palabra:
1) ¿Hay una lección para aprender? 2) ¿Hay una bendición que debo disfrutar? 3) ¿Hay un mandamiento que debo obedecer? 4) ¿Hay un pecado que debo evitar? 5) ¿Hay una verdad que debo llevar y compartir?
Pedro dice: “Si alguno hable, hable conforme a la Palabra de Dios” 1 Pedro 4:11
Algunos predicadores lo hacen mejor que otros, pero nadie puede predicar un mejor evangelio, porque el evangelio es uno solo.
Dios habla por medio de las Escrituras, por mensajes, por su Espíritu Santo, por eso, la Biblia dice: “El que tenga oído para oír oiga”, muchos no han aprendido a estar quietos y escuchar lo que Dios diga en los momentos de devoción personales.
Aprenda a decir: “Habla Señor que tu siervo escucha”, NO MONOLOGUE Muchos son egoístas al orar, en vez de escuchar a Dios, casi demandan que Dios nos escuche.
La sociedad de hoy está llena ruido infernal y mundano, que casi desconocemos lo que es un tiempo de quietud, y de silencio en la presencia de Dios.
EJEMPLO: Un creyente visitó Israel, y al cruzar por unos campos de pastoreo, el guía le dijo: A estos campos vienen los pastores con sus ovejas para que se alimenten, exactamente como lo hacían los pastores de hace ya más de dos mil años, pero con una diferencia que los pastores de antaño, por lo general tenían una flauta con la cual interpretaban hermosas melodías, hoy en día tienen radios transistores, y ipads y celulares para escuchar lo que se les antoja escuchar sea bueno o sea malo; y él pensó: Si David hubiera tenido uno de estos modernos inventos estoy seguro que no hubiera escrito el Salmo 23.
2) Hable menos, Hay que pensar antes de hablar, ¿Por qué? Porque hablamos demasiado, abrimos mucho la boca.
Proverbios 10:19 “En las muchas palabras no falta pecado; Mas el que refrena sus labios es prudente”. Es la ley de las probabilidades, y de matemáticas, más hablás más peligro habrá.
Algunas personas hablan de compartir su fe, y no vemos que compartan efectivamente su fe, hablan de discipular personas y no vemos nunca sus nuevos discípulos, hablan de ser solidarios con el prójimo, y nunca se juegan por él, hablan de que aman mucho a Dios y no se nota para nada. En las muchas palabras no falta pecado.
Proverbios 17:27-28 “El que ahorra sus palabras tiene sabiduría; De espíritu prudente es el hombre entendido. 28 Aun el necio, cuando calla, es contado por sabio; El que cierra sus labios es entendido”.
Eclesiastés 5:3, “Porque de la mucha ocupación viene el sueño, y de la multitud de las palabras la voz del necio”.
¡Desconfíe de la persona que habla mucho!, tenga cuidado del que tiene una ametralladora verbal, incontinencia verbal. Mejor que use un bozal.
El libro “El Progreso del Peregrino”, de Juan Bunyan, escrito en el siglo XVII, y es una alegoría de la vida cristiana, allí el peregrino se encuentra con el señor LOCUAZ, y le dice: El señor Locuaz habla de la oración, del arrepentimiento, del nuevo nacimiento, y de la fe, pero sabe tan solamente hablar de ellos. He estado en su familia y su casa está TAN VACIA de religión como la clara de huevo está carente de sabor”.
En la conclusión de un áspero dialogo, Jesús Mateo 12:36 dice: “Mas yo os digo que de toda palabra ociosa que hablen los hombres, de ella darán cuenta en el día del juicio”. ¿A qué palabras se refiere? A las improductivas, denigrantes, hirientes, groseras, maldicientes.
En Santiago 2:17 leemos: “Así también la fe, si no tiene obras, es muerta en sí misma”.
La palabra muerta en este versículo es la palabra ociosa de Mateo 12:36.
¿Qué quiere decir ociosa? Que es improductiva, que no contribuye para nada que desaniman.
El humor es beneficioso, pero usado como burla o sarcasmo, es denigrante, Dios no quiere que seamos agresivos, ni groseros usando el humor, a veces hablamos de las cosas sagradas con labios mundanos y profanos.
MATEO 12 PALABRAS QUE ACUSAN: Los fariseos acusan a Jesús de echar fuera los demonios por el poder de Beelzebú, por eso Jesús da una advertencia contra las palabras acusadoras dichas seriamente. Hay daño en las palabras necias:
Hogares destrozados por palabras y expresiones inconvenientes: “Ahí va el espiritual”, “Sos igual que tu madre”, o “Sos el calco de tu viejo”, (¿Qué culpa tienen nuestros parientes si el pecado es responsabilidad propia?)
Gente inocente en la cárcel, por las palabras deshonestas o testimonio falso. José el patriarca fue a la cárcel por las palabras mentirosas de la señora de Potifar.
Corazones destrozados por promesas o palabras falsas.
Iglesias divididas, por las palabras de unos contra otros. En Jerusalén hubo división entre judíos y griegos por la comida solidaria, por eso nacen los diáconos.
Almas perdidas por gente que no controla sus lenguas.
Una de las marcas de una persona nacida de nuevo, es que su lengua está bajo el control del Espíritu Santo.
Salmo 141:3 dice: “Pon guarda a mi boca, oh Jehová; Guarda la puerta de mis labios”. Esta es una sabia manera de pedir ayuda a Dios para controlar tus palabras, de estar consciente de las cosas que decís:
Entonces, Santiago hace énfasis en que las marcas de un nuevo cristiano son:
1) Que sea pronto para escuchar, y 2) Que sea tardo para hablar y 3) Tardo para airarse, Cuando una persona escucha más y habla menos, afecta su temperamento porque aprende a controlar su corazón, porque cuando sus pensamientos son controlados y su lengua es controlada, entonces su temperamento es controlado,
La verdadera comunicación procede del corazón. ¿Sabés lo que es un aljibe? Un refrán de campo dice: “El balde saca lo que abajo el pozo tiene”. El evangelio nos declara, que de la abundancia del corazón habla la boca: Las palabras sin fin demuestran un corazón inquieto, las palabras jactanciosas demuestran un corazón inseguro, las palabras obscenas demuestran un corazón sucio, las palabras críticas demuestran un corazón amargado, las palabras dulces demuestran un corazón feliz, las palabras verdaderas demuestran un corazón alegre, las palabras amorosas demuestran un corazón amable. ¿Quieren saber lo que hay en un corazón? Dejen simplemente escapar las palabras. Es increíble el poder de la lengua.
EL NUEVO NACIMIENTO TRAE UN NUEVO COMPORTAMIENTO.
3) Enójese menos. Dante Alighieri estaba bastante triste, porque lo habían echado de la ciudad de Florencia, por causa de esos movimientos políticos que hay siempre y que destierran a algunos y lo dejan fuera de su tierra, comenzó a escribir la Divina Comedia, y lo primero que puso en la Divina Comedia, es el infierno, y en el infierno puso a todos los que lo habían echado, así como al infierno lo manejaba él, puso los nombres de la gente que lo habían echado, y en los peores castigos que tenía, pero lo más impresionante en su obra maestra, es lo que él coloca en la puerta del infierno, un cartel que dice: Dejad los que aquí entráis toda esperanza.
Ira es: Perder el control de tu temperamento, En verdad, no es que perdemos nuestro temperamento, más bien lo encontramos.
Efesios 4:26 “Airaos, pero no pequéis; no se ponga el sol sobre vuestro enojo”, es pecado cuando su enojo se transforma en ira; Jesús se enojó, pero no pecó.
Jesús se enojó en, Marcos 3:5 por la dureza del corazón de ellos frente al dolor, y la necesidad de otros seres humanos. Podemos saber mucho de nosotros mismos por las causas nos enojan, pero: “Airaos pero no pequéis”, es muy fácil pasar los límites de la indignación justa con nuestras irritaciones personales.
Recuerde que la ira de los hombres no obra la justicia de Dios, porque nuestras iras son irracionales, y lo irracional no puede jamás ser justo, solo Dios es justo, su justicia demanda el castigo de nuestros pecados, pero su amor nos redime y protege.
Cuando te enojás y perdés el control, abris la puerta a toda clase de pecados que normalmente no los cometería, decís cosas que vos sabés que no deberías decir, y hacés cosas que vos sabés que no deberías hacerlo, Proverbios 16:32 dice: “Mejor es el que tarda en airarse que el fuerte; Y el que se enseñorea de su espíritu, que el que toma una ciudad”.
Ser rápidos en enojarse, y tener un temperamento violento, no es una señal de fortaleza, es un signo de infantilidad, de falta de madurez, actúa como un bebé.
Yo tengo inclinación a varios enojos, algunos son muy ácidos, ¿Cuáles son? Cuando tengo que hablar con Arnet, y pasó hasta horas tratando de entender, me enoja cuando alguien predica doctrina falsa y engaña a los hijos de Dios; también cuando alguien es indiferente al dolor humano o al que está sin Cristo, también me enoja cuando intentan engañarme o engañar a otro con prácticas comerciales deshonestas.
El libro de Proverbios en la Biblia según Robert J. Tamasy ofrece consejo sabio acerca del enojo y sus peligros. He aquí algunos de los principios a considerar:
EL ENOJO ES PELIGRO INMIENTE; por eso ante el peligro saquemos estas lecciones:
Mostrar Auto Control. En vez de mostrarte enojado cuando alguien te ofende, demostrá tu control personal y carácter, no respondiendo de la misma forma. «El necio al punto da a conocer su ira; mas el que no hace caso de la injuria es prudente« Proverbios 12:16.
El enojo controlado muestra sabiduría. El enojo puede causar que la gente actúe impulsivamente, impidiéndole avaluar apropiadamente las circunstancias que lo llevaron al enojo. «El que tarda en airarse es grande en entendimiento; mas el que es impaciente de espíritu enaltece la necedad» (Proverbios 14:29). «El necio da rienda suelta a toda su ira, más el sabio al fin la sosiega» (Proverbios 29:11).
Permanecer calmado puede evitar que un conflicto crezca. ¿Has notado que cuando alguien está hablando fuertemente o incluso gritando, si la otra persona responde tranquila y calmadamente, la tensión en la situación se desvanece? «El hombre iracundo promueve contiendas; mas el que tarda en airarse apacigua la rencilla» (Proverbios 15:18).
El enojo puede hacernos decir palabras que después nos pesen. Cuando estás enojado, es fácil decir cosas hirientes que puedes estar sintiendo, solo para desear más tarde retractarte. «El que ahorra sus palabras tiene sabiduría; de espíritu prudente es el hombre entendido» (Proverbios 17:27).
Tratar de proteger a una persona enojada puede ser inútil. Algunas veces tratamos de servir como pacificadores, buscando intervenir por una persona cuyo enojo ha ido fuera de control. Esto solo pospone las inevitables consecuencias. «El hombre temperamental debe pagar la pena; si lo rescatas, tendrás que hacerlo nuevamente» (Proverbios 19:10).
EL NUEVO NACIMIENTO TRAE UN NUEVO COMPORTAMIENTO.
No emules el comportamiento de la persona enojada. Cuando trabajé con alguien temperamental, comencé a copiar sus actos. Esto no mejoró mi desempeño ni mi reputación. «No te entremetas con el iracundo, ni te acompañes con el hombre de enojos, no sea que aprendas sus maneras y tomes lazo para tu alma» (Proverbios 22:24-25).
Al enojarte fíjate bien esto:
1) Que tengás una razón justa. Por lo general nos enojamos, cuando creemos que nuestros derechos son amenazados, o nos ofenden, o alguien se cola en la fila. El enojo de Jesús siempre fue justificado, cuando en forma personal fue maltratado, insultado, golpeado, y crucificado jamás pronunció una palabra de enojo, desde la cruz, si imploró perdón para sus verdugos.
La mayoría de nosotros nos enojamos cuando alguien nos hace daño, Jesús se enojó cuando vio sufrir a otros seres humanos, cuando vos te enojés, asegurate que tu enojo es justo y por la razón adecuada.
Jesús, por lo general, no se enojó con los individuos, porque él los amaba, Jesús se enojó contra instituciones y ritos, y pecados, no contra el pecador, vos podés enojarse por el daño que te han hecho, pero no contra quienes te hicieron el daño, pero hacemos al revés, nos enojamos con las personas; y si bien es cierto que Jesús se enojó frente a corazones endurecidos, demostró físicamente su enojo contra los que habían hecho de la casa de su Padre una cueva de ladrones, sin embargo, él fue compasivo y tierno con aquellos que estaban esclavizados por sus pecados.
Enojate contra el pecado pero amá profundamente al pecador, enojate, sentí iras contra el pecado, pero amá sin restricciones al pecador, porque eso es exactamente lo que el Señor Jesucristo hizo, y nosotros también. Jesús se enojó por la razón y la causa correcta.
2) Se enojó de la manera adecuada. Su enojo le hizo parte de la solución, sin agrandar más el problema, cuando vos perdés tu temperamento, de ninguna manera podrá ser parte de la solución sino que se vuelve parte del problema: La ira del hombre no obra la justicia de Dios,
No se requiere ser muy inteligente para criticar, cualquiera puede hacerlo,
HISTORIA: Un hombre subió a un taxi rumbo a la Estación del Ferrocarril y cuando iban por el carril de la derecha, por poco se estrellan con un auto que de repente y de la nada salió como bólido de donde estaba estacionado. El conductor del taxi en que iba alcanzó a frenar a todo lo que daba, el taxi se derrapó y por un pelo de rana casi le pegamos al auto que quedó frente a nosotros. Después de esto, el conductor del OTRO auto, el tipo que casi causó el accidente, asomando la cabeza por la ventanilla comenzó a gritarnos una cantidad horrible de insultos. Todavía recuperándome del susto, lo que acabó de sacarme de mis casillas fue la actitud del chofer de mi taxi, quien en forma extremadamente amistosa y cortés le sonreía y saludaba con la mano al conductor del otro auto. Yo estaba furioso y confundido, pero no me quedé con las ganas y le pregunté al chofer de mi taxi que por qué se ponía a sonreír y saludar al tipo que casi nos hizo chocar, arruinar su taxi y posiblemente hasta enviarnos al hospital. Entonces, el taxista con voz pausada me contó lo que ahora yo llamo «La Ley del Camión de Basura». Mire, me dijo: ¿Ve aquel camión de basura? Sí, le dije, ¿y eso qué tiene que ver?
-Pues, así como esos camiones de basura, hay muchas personas que van por la vida llenos de basura, frustración, rabia, y decepción. Tan pronto como la basura se les va acumulando necesitan encontrar un lugar donde vaciarla, y si usted los deja, seguramente le vaciarían su basura, sus frustraciones, sus rabias y sus decepciones. Por eso cuando alguien quiere vaciar su basura en mí, no me lo tomo personal; sino tan sólo sonrío, saludo, le deseo todo el bien del mundo y sigo mi camino. Hacelo vos también y te agradará el haberlo hecho, te lo garantizo.
¿Con que frecuencia permito que estos Camiones de Basura me atropellen; y cuán a menudo recojo esa basura y la esparzo a otra gente en casa, en el trabajo o en la calle.
El que rápido se enoja tiene una mente necia. Eclesiastés 7:9 “No te apresures en tu espíritu a enojarte; porque el enojo reposa en el seno de los necios”.
Bibliografía: El Maná del Lunes, Comentarios de Adrián Rogers, ejemplos de varios lugares.