13 diciembre, 2015

En la tierra PAZ!


Por: | Temas:

Si el reproductor no funciona podés escuchar el audio siguiendo este link - Descargar audio

Compartir en redes sociales:

Si hay algo que el  hombre no tiene es: PAZ. Si hay algo que Dios si tiene es: Paz

Lucas 2:14¡Gloria a Dios en las alturas, Y en la tierra paz, buena voluntad para con los hombres!” ¿Quiénes escucharon? Los pastores, y fueron sorprendidos por el anuncio. La tranquilidad de la noche se interrumpió, pero fue un llamado, que los movilizó hacia el Niño.

El regalo de Dios viene al mundo y para la mayoría pasa desapercibido.

Se demuestra que la iniciativa de la revelación es exclusiva de Dios. Dt 23:23.

Para casi todo el mundo, el nacimiento de Jesús pasó desapercibido. El decreto de Augusto César fue parte de un plan, Dios lo usó para mover a José y María de Nazaret a Belén. Esto significa que tanto María, como el emperador pagano, fueron instrumentos de Dios con una diferencia: María voluntariamente se rindió a la voluntad de Dios, mientras que Augusto César fue un instrumento inconsciente.

El regalo de Dios viene avalado por un plan preconcebido desde la eternidad.

¿Por qué tantas complicaciones para que naciera Jesús en Belén? José, el padre adoptivo de Jesús, era descendiente de David no es solo un detalle de genealogía; es el cumplimiento de una promesa de Isaías: «Saldrá una vara del tronco de Isaí, y un vástago retoñará de sus raíces» (Isaías 11:1) De esta familia, surgiría un renuevo – un niño que restauraría y sobrepasaría la gloria del rey David. Por medio del profeta Miqueas, Dios había dicho lo siguiente: «Pero de ti, Belén Efrata, pequeña entre los clanes de Judá, saldrá el que gobernará a Israel; sus orígenes se remontan hasta la antigüedad, hasta tiempos inmemoriales.» (Miqueas 5:2) Era necesario, entonces, que José y María viajaran hasta Belén, para que se cumpliera la profecía. Todo sucedió de acuerdo al plan divino.

El regalo de Dios es ofrecido a todos pero disfrutado solo por aquellos que lo aceptan

Lucas nos dice que Jesús nació en un establo, con malos olores y lleno de contaminación. El dueño de la posada, ignoró el gran suceso. Los líderes religiosos tampoco se dieron cuenta de lo que estaba sucediendo.

El rey Herodes sólo vio en Jesús a un posible rival. A los que tenían corazones dispuestos, Dios les reveló la llegada de su Hijo. Algunos de ellos fueron pastores, humildes, sin mucho estudio ni educación – pero creyeron la Palabra que los ángeles les dijeron, y fueron a visitar a Jesús.

Hagamos un poco de historia:

Discípulos no pacíficos: ¿Sabías que en el grupo de Jesús había un guerrillero? Simón el zelote. En la Edad Media, surgieron las famosas cruzadas, que intentaban recuperar la Tierra Santa de los infieles fue una demostración de fuerza y violencia, nada de paz. De estos hechos quedó una pobre imagen de los cristianos.

El Instituto para la Paz en Estocolmo, Suecia, dice que de 6 mil años de historia ha habido solo 25 años de paz, toda la historia humana son guerras, las guerras de Napoleón, de Alejandro Magno, de guerras de judíos contra musulmanes, y de blancos contra negros, guerras, guerras, todos queremos un mundo mejor, un mundo justo y con PAZ, donde se respeten nuestros derechos, y nosotros mismos traemos la guerra en el corazón, ¿De dónde viene todo esto? Del código genético que traemos alterado, corrompido por el pecado, al comer del árbol del conocimiento del bien y el mal, el ser humano, decidió él determinar que es el bien y el mal, esta es la razón por la cual el mundo se encuentra así.

Dios envía a su Hijo al mundo, para corregir el problema moral, espiritual, (mediante su muerte), si alguien iba a solucionarlo, no íbamos a ser nosotros; porque el pecado nos alteró, estábamos en tinieblas, el hombre natural no percibe el mundo espiritual, solo juzga por lo que ve, oye, y siente, necesitamos que alguien de ese mundo espiritual entre a nosotros, nos quite las vendas, y podamos ver que existe algo mucho más allá que trasciende lo material, lo visible y lo terrenal.

El siglo XX con sus cincuenta guerras, la guerra fría hasta el desmoronamiento de la Unión Soviética, y las luchas tribales en África y los conflictos actuales de Medio Oriente como el de Isis y otros movimientos fanáticos fundamentalistas, nos demuestran una sola cosa: La tendencia humana es al conflicto, la violencia, y a dirimir toda diferencia usando la fuerza.

Si hay algo que el  hombre no tiene es: PAZ. Si hay algo que Dios si tiene es: Paz 

¿Cómo empezó todo? El Pastor José Martínez dice: El hombre como muchos de los mamíferos se rige por instintos feroces, cuando ve peligrar su supervivencia, su apareamiento procreador o la parcela de su dominio.

¿Cómo es que el hombre perdió la paz?

El hombre fue creado a la imagen de Dios, y puesto en un lugar idílico, donde nadie hacía suponer un cambio en su brillante historia. El hombre dialogaba con Dios y estaba en PAZ con la creación. TODO ERA ARMONIA Y AUGURABA UN FUTURO BRILLANTE. Hasta que por una sugerencia exterior, la criatura decide rebelarse contra la autoridad amorosa del universo.

El hombre se independizó de su Creador.

Ya no interesó más lo que era justo, que por otra parte está estampado en nuestro cerebro, lo noble, lo adecuado. ¿Qué fue puesto en su lugar? El interés más cruel y egoísta, y esos intereses serían defendidos a capa y espada, y si fuera necesario la violencia.

¿Se acuerdan de Caín y  Lamec? Uno asesinó porque su orgullo fue herido, cuando su prestigio fue lastimado y Dios aceptó la ofrenda de Abel pero no la de Caín.

Lamec fue el primer hombre en romper el compromiso de fidelidad al tener dos mujeres: Ada y Zila, (Génesis 4:23-24) fue cruel, bruto y dispuesto al crimen

El hombre no tiende hacia la justicia, sino, hacia la venganza desbordada, Génesis 4:23 dice: “Y dijo Lamec a sus mujeres: Ada y Zila, oíd mi voz; Mujeres de Lamec, escuchad mi dicho: Que un varón mataré por mi herida, Y un joven por mi golpe. 24 Si siete veces será vengado Caín, Lamec en verdad setenta veces siete lo será”.

Jesús también habló de 70 veces siete. Justamente hace referencia a Génesis 4, el primer hombre que hizo un canto de venganza, (Jesús hizo un canto al perdón) y dice: Me hirieron, yo lo voy a matar, este malvado no creía en el ojo por ojo y diente por diente, creía que era más que ojo por ojo y diente por diente, porque no dice: Me hirieron lo voy a herir. Y si Caín fue vengado siete veces, yo voy a ser vengado 70 veces 7, él no tiene un concepto de justicia, tiene un concepto de venganza desde el punto de vista humano, hay que devolver más de lo que uno recibe. Cuando Dios dijo: “Ojo por ojo y diente por diente”, estaba diciendo: Hay que ser justos, este es el límite.

El hombre es vengativo, entonces, Dios sabe que el hombre no tiende hacia la justicia, ni el equilibrio y ni la equidad, y hay que ponerle un límite, y entonces establece esta ley: “Ojo por ojo y diente por diente”, porque el “Ojo por ojo y diente por diente” es la expresión simbólica de lo que nosotros llamamos justicia.

Si hay algo que el  hombre no tiene es: PAZ. Si hay algo que Dios si tiene es: Paz

La ira de Caín y la soberbia de Lamec fueron semillas que germinaron en sus descendientes, trayendo a posteriori toda la cosecha de malos frutos de guerra y violencia.

¿Cuáles fueron las causas de las guerras que siguieron? Se ampliaron: Odio, orgullo, superioridad, afán de gloria o dominio (Hitler decía que el pueblo alemán necesitaba más espacio para poder vivir), política arrogante de algunas naciones, minorías subversivas que violentamente se oponen a otras mayorías, etc.

Sumado a todo esto están: Las injusticias crecientes, la ambición, sociedades opulentas carentes de generosidad, grandes grupos humanos con escasos o nulos recursos.

NO HABRA PAZ EN EL MUNDO SI HAN DE SER LOS SERES HUMANOS QUIENES LA ESTABLEZCAN.

La causa principal de la falta de paz: ES EL PECADO HUMANO. Santiago 4:1 dice: “¿De dónde vienen las guerras y los pleitos entre vosotros? ¿No es de vuestras pasiones, las cuales combaten en vuestros miembros?”

Si hay algo que el  hombre no tiene es: PAZ. Si hay algo que Dios si tiene es: Paz

Alfredo Nobel dijo: “Quisiera inventar una sustancia o una máquina con un poder de destrucción en masa tan enorme que impidiera la guerra para siempre. El nombre de este hombre está vinculado con la mejora de la humanidad, sin embargo amasó su fortuna con la venta de armas bélicas. Fue un químico e industrial sueco que fue llamado “el mercader de la muerte”, pues inventó la dinamita y se hizo rico con la fabricación y venta de explosivos letales. El murió en 1.896 y en su testamento de 9 millones de dólares indicó que con la renta de ese dinero anual se premiara a las personas que alcanzaran notables logros en los campos de la física, química, medicina, la literatura y la paz. Luego se agregó economía.

Al principio todos se quedaron perplejos, porque ¿Cómo un fabricante de explosivos recompensaría los méritos realizados en pro de la paz y en beneficio de la humanidad? Hubo quienes lo vinculaban con los remordimientos de conciencia a causa de la naturaleza destructiva del trabajo de toda su vida, otros creyeron que él trabajó a favor de la paz desde un principio. Él le dijo a un periodista: “Quizá mis fábricas pongan fin a la guerra aún más pronto que sus congresos. El día en que dos campamentos militares puedan aniquilarse mutuamente en cuestión de segundos, es probable que todas las naciones civilizadas retrocedan horrorizadas y disuelvan sus ejércitos”.

El siglo XX fue un siglo signado por la violencia. Veinte años después de Nobel, estalló la Primera Guerra Mundial donde mueren 10 millones de soldados y más del doble fueron heridos. La atrocidad por esta guerra despertó interés por la paz, y se creó la Sociedad de Naciones, Pero de nuevo en 1.939 estalló la Segunda Guerra Mundial, más horrenda que la Primera, y en el taller de Nobel en Krummel se instaló la más grande fábrica de municiones de Alemania con 9.000 empleados. Los aliados le tiraron más de 1.000 bombas y la dejaron en cenizas.

¿Por qué no tenemos PAZ?.

Isaías 48:22, No hay paz para los malos, dijo Jehová”, e Isaías 57:20-21 “Pero los impíos son como el mar en tempestad, que no puede estarse quieto, y sus aguas arrojan cieno y lodo. 21  No hay paz, dijo mi Dios, para los impíos”.

Si hay algo que el  hombre no tiene es: PAZ.

Si hay algo que Dios si tiene es: Paz. Dios es llamado Dios de paz: Romanos 15:33 “Y el Dios de paz sea con todos vosotros. Amén.; 16:20 “Y el Dios de paz aplastará en breve a Satanás bajo vuestros pies. La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con vosotros.”; 1 Tesalonicenses 5:23 “Y el mismo Dios de paz os santifique por completo; y todo vuestro ser, espíritu, alma y cuerpo, sea guardado irreprensible para la venida de nuestro Señor Jesucristo”.

Si hay algo que el  hombre no tiene es: PAZ. Si hay algo que Dios si tiene es: Paz

¿Cómo se concilian estos dos puntos extremos, el hombre sin su paz y Dios con su paz? 2 Corintios 5:19-21 “Que Dios estaba en Cristo reconciliando consigo al mundo, no tomándoles en cuenta a los hombres sus pecados, y nos encargó a nosotros la palabra de la reconciliación.

Era necesario que Jesús viniera al mundo en un cuerpo de carne, porque un espíritu no tiene sangre, Génesis 3:15 tiene la primera promesa del Mesías: “Y pondré enemistad…” Enemistad es odio continuo “entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; ésta te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar”.

La palabra simiente, es la palabra hebrea zera”, y se tradujo en la Biblia como: Semen, esperma, descendencia, relaciones sexuales, fecundar, y alianza. Se tradujo en la Biblia semilla, semen en Levítico 15:16; descendencia en Levítico 21; acostarse o tener relaciones sexuales en Levítico 19:20; fecundar en Nm 5:28; y alianza en Daniel 2:43

¿Pudo Dios haberse equivocado y decir esto ya que la semilla la tiene el hombre y no la mujer? Cuando pasó el tiempo y Dios comenzó a abrir el conocimiento de la ciencia, de la genética y el ADN, se descubrió que el hombre es el que trae la semilla; aquí lo que Dios estaba dando la primera profecía, que el Mesías nacería virginalmente, la semilla, la pondría Dios.

¿Por qué José no podía ser quien hubiera engendrado a Jesús? ¿Por qué tuvo que intervenir Dios y poner el cromosoma Y en el óvulo de María? Si José hubiera puesto el esperma en el óvulo de María, Jesús hubiera nacido con pecado.

El pecado es transmitido a través de la sangre, ¿Qué pasó con Adán? Su sangre se infectó, y todos nosotros hemos nacido con sangre infectada, David dice en el Salmo 51:5 En pecado me concibió mi madre”, desde la concepción, desde la fecundación, la virgen concibió que es la palabra que habla que hubo una unión, entre un esperma divino y el óvulo de ella, eso es concebir, fecundar esto hizo que Cristo naciera sin pecado a través del esperma de Dios en María.

¿Puede Satanás mezclarse con algún ser humano y alterar la genética humana y producir monstruos? La Biblia nos dice: Si. Satanás quiso impedir Génesis 3:15, alterando la genética humana antes del Diluvio y produjo una descendencia al mezclarse con algunas mujeres, raros gigantes, buscando abortar el plan de redención, y Dios rescató a Noé y su familia.

Tenía que ser hecho pecado un cuerpo humano perfecto, y así pagar a Dios el precio de nuestra salvación, y el hombre fuese justificado, y por lo tal como resultado tendría esta PAZ.

Romanos 5:1 “Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo”. El vínculo averiado y afectado irreparablemente de parte nuestra, fue restaurado por obra de Dios. La salvación es tener a Cristo en el centro de la vida, y lo previo es el perdón, y al tener perdón recuperamos la paz.

Efesios 2:14 dice: “Porque él es nuestra paz, que de ambos pueblos hizo uno, derribando la pared intermedia de separación”. Como resultado de la obra restauradora de la salvación, tenemos paz, es un fruto del Espíritu, según Gálatas 5:22-23.

¿Cuál es la respuesta del hombre al ofrecimiento de reconciliación y paz?

Sabemos que no habrá conversiones masivas, aunque las anhelamos, porque está revelado que la maldad madurará hasta niveles infinitos, así como la bondad real será patrimonio de los verdaderos creyentes. Todo seguirá así hasta el retorno de Cristo, según Mateo 24:37-39 y Lucas 17:28-29 dice que los días de Noé, Lot y los nuestros serán iguales.

Pese a los anticipos negativos de la respuesta de los hombres, los que creemos tenemos verdadera paz, es una REALIDAD en nosotros: En medio de las dificultades tenemos paz.

El niño cuya entrada al mundo fue anunciada por los ángeles como que también venía la paz, cuando llegó a la vida adulta y en medio de grandes dificultades casi al fin de su trabajo en la tierra dijo lo siguiente en Juan 14:27

“La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo”.

La figura de un dictador mundial, que la Biblia llama Anticristo, Bestia, hombre de pecado tendrá la gente a sus pies en un primer momento y al pueblo hebreo por su ofrecimiento de paz, pero no TRAE LA VERDADERA PAZ, SOLO LA TRAE JESUS.

Esta paz que disfrutamos los verdaderos hijos de Dios es lo que el AT llama Shalom.

Paz en hebreo no es solamente ausencia de guerra, sino todo lo que comprende el sumo bien del hombre. Y por medio de Cristo se le capacita al hombre- para andar por los caminos que conducen a todo lo que significa vida, y ya no a todo lo que significa muerte.

Paz, es eirene. Compare «irénico» (conciliador) e «Irene». Un estado de reposo, quietud y calma; una ausencia de lucha; tranquilidad. El término generalmente denota un bienestar perfecto. Eirene incluye relaciones armoniosas entre Dios y los seres humanos, entre las personas, naciones y familias. Jesús, como el Príncipe de Paz, da paz a aquellos que le invocan en busca de salvación personal.

Pablo habla de esta paz que sobrepasa todo entendimiento en Filipenses 4:6-7, Isaías 9.6,7 “Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz”.

¿Por qué hay tanto caos e inseguridad en el mundo si Jesús es el Príncipe de Paz? Aunque este versículo es, básicamente, una profecía en cuanto al futuro reino de Cristo, los títulos del Señor reflejan también su razón para venir al mundo hace 2.000 años, y de su actual ministerio para con nosotros.

La primera responsabilidad de Jesús, como el Príncipe de Paz, fue reconciliar a la humanidad pecadora con su Padre. Al pagar el castigo de los pecados del mundo, Él hizo posible que todos los que crean en Él tengan paz con Dios (Romanos 5.1). Cuando recibimos a Cristo como nuestro Salvador personal, nuestros pecados son perdonados y nos convertimos en miembros de la familia de Dios.

Cristo no solo logró nuestra paz con Dios; también nos da su paz (Colosenses 3.15). Esta es una sensación de tranquilidad, calma y serena confianza que no depende de las circunstancias. Con el anuncio de la Navidad, la serenidad es algo que todos anhelamos, pero a menudo parece fugaz. La única manera de tenerla es dejando que el Príncipe de Paz gobierne nuestras vidas.

El símbolo de la paz para todo el mundo es una paloma blanca que lleva una rama de olivo en el pico, y cuando ves este símbolo, inmediatamente lo identificás con la paz, este símbolo, viene de la Biblia; en Génesis 6, se habla del Diluvio universal, que fue un juicio de Dios sobre la maldad de los hombres, porque todos los pensamientos de los hombres se dirigían directamente al mal y persistentemente hacia el mal, había una humanidad que se había transformado en maligna, se había inclinado peligrosamente al mal, y se dice que la manifestación más visible del mal, es que la tierra estaba llena de violencia, porque la violencia es la expresión visible del mal.

El Diluvio arrasó con todo luego de un año, Noé envía una paloma tres veces: La primera no tiene donde asentar su pie y vuelve, la segunda viene con la ramita de olivo y la tercera vez ya no regresa, esa rama de olivo no solamente significa la paz abajo, y la paz con Dios y que hay esperanza; que Dios les volvía a tender la mano, que no los iba a dejar allí, que Dios se acercaba nuevamente y le mostraba que la tierra volvía a producir, entonces, el hecho de que la tierra produjera, hacía renacer la esperanza, puede decirse que en ese momento, Dios tuvo ya buena voluntad para con los hombres.

Así como en este cántico de Lucas 2, se dice que Dios tiene buena voluntad, se puede decir que esa fue una de las grandes manifestaciones para toda la humanidad, de que Dios es una Dios de buena voluntad, y que Dios quiere la paz y que Dios busca la paz,

La paz fue sacada de nuestra tierra, los argentinos no estanos en guerra, pero tampoco estamos en paz, afrontamos grandes problemas que tienen que ver con la falta de paz.

Afrontamos un delito en crecimiento, inseguridad generalizada, estallan hechos de vandalismo frecuentemente, el narcotráfico está instalado, están operando ya los sicarios, y esto ha hecho de que se desvalorizara la vida. ¿Por qué? Porque no tenemos paz, en el corazón, y nos está pasando lo mismo que aquella generación del Diluvio, el designio del corazón de hombre está yendo hacia el mal. Necesitamos al Príncipe de Paz.

En Apocalipsis 6 habla del Anticristo que monta un caballo blanco. ¿Sabe cuál es ese nuevo símbolo? Un caballo blanco, un artículo de hace algún tiempo que «El caballo blanco es símbolo de paz”, «La paloma como símbolo de paz y fraternidad entre las naciones, enfrenta un competidor: Un caballo blanco», El diseño del caballo blanco fue donado con el propósito de unir pacíficamente los cinco continentes, simbolizado a través de la fortaleza del caballo que asegura libertad y unidad. En la cabeza del caballo habrá cinco cintas de diferentes colores, que representan los cinco continentes: Europa, Asia, Oceanía, América, y África. Así que, se está impulsando un nuevo símbolo de paz, un caballo blanco para que unifique al mundo. Y Daniel haciendo referencia al Anticristo dice que: “Por medio de la paz destruirá a muchos”.

“La misericordia y la verdad se encontraron; La justicia y la paz se besaron”. Salmo 85:10. Proféticamente Dios nos dice que llegará todo al mismo tiempo, porque en la cruz, se mostró la misericordia de Dios, la verdad de muchos avisos de la Palabra acerca de este hecho, la justicia de Jesús que nos declara justos y la paz que deriva del Príncipe de Paz.

Bendito sea el Señor!

Compartir en redes sociales: