La importancia de las pruebas
Por: Elias Cabrera
La importancia de las pruebas.
Santiago 1:2
“Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en diversas pruebas”
Tened: #2233, Gr: jeguéomai: “tened, considerar, evaluar, creer, entender” (voz media) => Tengan
Sumo gozo: {#3956 Gr.: pás: palabra primaria o raíz de “todo, total” #5479 Gr.: jará: “gozo”} => Pleno gozo Halléis: bajo esta palabra hay varios conceptos del original a tener en cuenta:
1. #4045, Gr. Peripípto: caer en algo, penetrar enteramente, traspasar. Que a su vez es una conjunción de 2 palabras:
#4012, Gr.: Perí: Quedar rodeado, estar enteramente sumido en algo y #4098, Gr.: Pípto: perecer, postrar, caer
Esta palabrita “Halléis” entonces quedaría más o menos así: caído en (eso) que los rodee completamente Pruebas: #3986 Gr.: Peirasmós: poner a prueba, prueba, tentación.
Parafraseemos el versículo:
Hermanos míos, tengan absoluto gozo del Señor cuando caigan y queden completamente rodeados por diferentes tipos de pruebas, sean tentaciones o pruebas de Dios.
Gozo: Alegría permanente que tanto el individuo que cree en Cristo como la iglesia están llamados a experimentar. Fruto de una relación segura e inquebrantable con Dios.
Caigan: uno no premedita las pruebas, simplemente aparecen y caemos en ellas quedando completamente sumergidos en ellas.
Prueba: tanto tentación como prueba. Por eso Santiago va a aclarar más adelante (v13) que no es Dios el que tienta, porque la intención del que tienta a alguien es hacer que sea perjudicado, que se lastime, que pierda (Gen. 3:4-5). Mientras que el propósito de la prueba es hacer que algo al salir aprobado tenga mejores y mayores cualidades.
La tentación te roba, mientras que la prueba te otorga, siempre y cuando salgamos aprobados de la prueba.
Pero este es otro tema… solo quería hacer notar la diferencia Hay al menos 2 propósitos fundamentales de las pruebas:
1. Madurez espiritual:
2. Descubrir mi corazón:
(Versículos 3 y 4) Paciencia, o mejor dicho, perseverancia, constancia. La madurez espiritual me permite hacer raíces cada vez más profundas: Efesios 4:14: para que ya no seamos niños, sacudidos por las olas y llevados de aquí para allá por todo viento de doctrina, por la astucia de los hombres, por las artimañas engañosas del error;
Por eso el versículo 8 (leer), la madurez espiritual es el camino a ser una persona de un solo ánimo, un solo espíritu, con un solo propósito: caminar rumbo a la perfección, caminar rumbo a Cristo, esa es la meta.
Es la prueba de que Dios sigue trabajando en mi vida.
Transitar, más que transitar, disfrutar, gozar este proceso que dura toda la vida es recuperar gracias a la misericordia y gracia de Dios lo que la tentación aceptada me robó por consecuencia del pecado, el ser apto de estar delante de la presencia de Dios.
Gen. 22:1 y 9-12
Dios decide poner a prueba a Abraham.
Abraham a diferencia de toda su vida pasada, obedece a Dios instantáneamente.
Al extender el cuchillo y estar a punto de matar a su hijo, Dios se da cuenta de que verdaderamente lo ama… ¿¿¿¡¡¡¡Quéeeee????!!!!
¿Desde cuándo el Dios omnisciente que escudriña los corazones necesita de un acto humano para determinar que hay en su corazón?
Gen. 4:3-7
Dios vio el corazón, no la obra. No le interesan las obras, Dios no necesita las obras, sino que le interesa el que hace la obra y como la hace, que lo motiva a hacerla.
Miq. 6:6-8
Dios desea que lo amemos como el nos amó primeramente a nosotros.
Oseas 11:1-8 DHH
1»Cuando el pueblo de Israel era niño, yo lo amaba;
A él, que era mi hijo, lo llamé de Egipto.
2 Pero cuanto más lo llamaba,
Más se apartaba de mí.
Mi pueblo ofrecía sacrificios a los dioses falsos
Y quemaba incienso a los ídolos.
3 Con todo, yo guié al pueblo de Efraín
Y lo enseñé a caminar;
Pero ellos no comprendieron que era yo quien los cuidaba.
4 Con lazos de ternura, con cuerdas de amor,
Los atraje hacia mí;
Los acerqué a mis mejillas
Como si fueran niños de pecho;
Me incliné a ellos para darles de comer,
5 pero ellos no quisieron volverse a mí.
Por eso tendrán que regresar a Egipto,
Y Asiria reinará sobre ellos.
6 La espada caerá sobre sus ciudades
Y acabará con sus fortalezas,
Destruyéndolos a causa de los planes que hacen.
7 Mi pueblo persiste en estar alejado de mí;
Gritan hacia lo alto, pero nadie los ayuda.
8 » ¿Cómo podré dejarte, Efraín?
¿Cómo podré abandonarte, Israel?
¿Podré destruirte como destruí la ciudad de Admá,
O hacer contigo lo mismo que hice con Seboím?
¡Mi corazón está conmovido,
Lleno de compasión por ti!
9 No actuaré según el ardor de mi ira:
No volveré a destruir a Efraín,
Porque yo soy Dios, no hombre.
Yo soy el Santo, que estoy en medio de ti,
Y no he venido a destruirte.»
“porque yo soy Dios, no hombre.”
Manu Ruiz compartía el martes por la noche: Dios porque amó, dio; el hombre en cambio ama si primeramente lo hicieron por él…
¿Cómo no vamos a necesitar de pruebas para poder ser cada día más parecidos a Cristo? ¿Para que Él cambie esa mentalidad? Sabiendo que eso agrada al Padre que dio a su Hijo para que pueda volver a El
La prueba determina que hay en mi corazón. Determina en qué posición estoy, que es lo que mueve mis emociones. ¿Qué te sale por impulso en medio de la prueba? ¿Qué decisión tomo?
¿Qué reacción tengo cuando me chocan el auto? ¿Cuando me encierran en la calle? ¿Cuando me roban? ¿Cuando me enfermo? ¿Cuando se te rompen los ligamentos de la rodilla?
La prueba me demuestra que amo más!!!
No solo se aprende y se fortalece la fe al pasar por la prueba y ser aprobado, sino que me sirve a mí para ver donde está puesto mi corazón.
Dios ya sabía cómo actuaría Abraham, si El conoce todas las cosas desde antes que fueran hechas, pero fue en ese instante donde Abraham supo, el supo, que amaba más a Dios que a su hijo.
Ahora, hay un pequeño detalle a tener en cuenta para que la prueba de su fruto, OBEDIENCIA. Porque tranquilamente por más pruebas por las que pase, si decido no aferrarme a Cristo, no querer amarlo, anteponer mi voluntad a la suya, no creerle (El es mentiroso, El no puede, El no quiere, El no me ama), desestimar el sacrificio de Cristo en la cruz por vos y por mí, esa prueba no purificó nada, esa prueba no sirvió de nada…
NO QUERER OBEDECER A DIOS=>NO AMARLO, ES LA UNICA FORMA DE NO SALIR APROBADO DE UNA PRUEBA NO APRUEBO PORQUE NO QUISE APROBAR!!!
Porque justamente si hablamos de pruebas de Dios, Él las dispone para nuestro crecimiento, Ef. 4:13 “hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo;”
Y si de tentaciones se trata:
1 Co. 10:13 No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar. Además, tenemos un Dios que sabe de la materia…
Hb. 2:18 Pues en cuanto él mismo padeció siendo tentado, es poderoso para socorrer a los que son tentados.
Hb. 4:15 Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado.
-Elías, pichón, nene… no tenés ni idea por lo que estoy pasando. -No, no tengo ni idea, pero sabes qué?, Dios si sabe…
Dejame terminar con esto: La prueba es también la firma, la garantía de que Dios sigue trabajando EN nosotros A PESAR DE nosotros porque: “Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios; Jn.1:18”
Porque somos sus hijos, y no nos va a dejar huérfanos, como padre amoroso guiará nuestros pasos.
Porque no va a tirar la toalla, “estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo;” Fil. 1:6
Porque “El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con él todas las cosas? Rom. 8:32
Porque te ama…
En este 2018, las pruebas van a venir, y gracias a Dios que así va a ser, pero, teniendo a Cristo delante, teniendo este propósito claro de Él para conmigo, entendiendo un poco más cada día su infinito amor, puedo decir con seguridad que:
“tendré por sumo gozo cuando me halle en diversas pruebas”