Mía es la venganza

Los violentos sucesos de las últimas semanas nos dan, en mi humilde juicio, una muestra más que el mundo ha entrado en su cuenta regresiva. Ignoro cuánto tiempo durará, pero casi sin ningún tipo de temor los cristianos debemos manifestar que avanza rápidamente el tiempo que nos llevará al retorno de Jesús. Mateo 24:6-8 y 11-13

Como sabemos, y solo para mencionar dos de los ejemplos más recientes, en pocas horas en Paris murieron producto de actos de terrorismo 19 personas y en Nigeria un grupo llamado Boko Haram cargo con explosivos a una NIÑA de 10 años quien se detonó (o la detonaron) en un mercado terminando con la vida de otras tantas. Este grupo ha matado más de 10.000 personas el año pasado en el país antes mencionado y recluta a niñas que mendigan por las calles de una empobrecida nación pese a ser uno de los exportadores más importantes de petróleo en el mundo. Este método de reclutamiento comenzó hace pocos meses y ya se llevó más de 60 vidas. Los padres venden a sus hijas. Una de las niñas captadas de esta forma y que se revelo contra su destino  contó que le decían cuando la adoctrinaban que con la obediencia a quienes la mandaban a matar y una oración a Alá, tenía asegurado el Paraíso. Ayer en NIGER 7 Iglesias fueron quemadas en defensa del Islam.

Pero este hecho quizás quedó opacado por lo ocurrido en Paris. Sin lugar a dudas el mundo se conmueve cuando los países desarrollados son atacados. Charlie Hebdo, el caricaturista asesinado, desde el 2004, es decir hace más de 10 años, dibujaba caricaturas que ofendían al cristianismo, al judaísmo, al islamismo,(MENCIONAR COMENTARIO VICENTE MASSOT – LO SAGRADO,  SAGRADO PARA EL ISLAM – IGLESIAS vs. MEZQUITAS) a la clase política, a TODOS. Por ejemplo y en lo que atañe a nuestra fe, ejemplificó el nacimiento de Jesús con una imagen de una mujer dando a luz a un niño con cara de animal. Por eso los cristianos debemos decir firmemente YO NO SOY CHARLIE, porque este talentoso artista era laicista: Doctrina que defiende la independencia del hombre, de la sociedad y del Estado de toda influencia eclesiástica o religiosa. Él no se llamaba ateo, pero odiaba a la Iglesia, por eso los cristianos no somos Charlie porque amamos la Iglesia del Señor que es representada en la Biblia como la novia que espera las bodas con el Cordero (Jesús) quien dio la vida por ella. Lamentablemente todos los hechos relatados, más aquellos que no tienen difusión masiva como los asesinatos de cristianos por el grupo ISIS  o EL, o las persecuciones en Egipto, Yemen, otros países de África y Asia nos muestran que hemos entrado “en los postreros tiempos”. La Biblia dice en 2 Timoteo 3: 1-5: “También debes saber esto: que en los postreros días vendrán tiempos peligrosos. Porque habrá hombres amadores de sí mismos, avaros, vanagloriosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos, impíos, sin afecto natural, implacables, calumniadores, intemperantes, crueles, aborrecedores de lo bueno,  traidores, impetuosos, infatuados (vanidoso-engreído), amadores de los deleites más que de Dios, que tendrán apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella; a éstos evita”.

 Lo más grave de todo esto es que el mundo piensa que esta es una guerra religiosa, cuando en realidad es producto del fanatismo de personas como las descriptas en la Palabra. La religión no es violenta; los hombre que dicen profesarla lo son. Dios es amor dice la Palabra y no podemos dejar de amar  aún  a quienes se burlan de nuestra fe, ni tomar ningún tipo de represalias. Todo hemos tenido o tenemos alguna persona en nuestra familia, o como vecinos o compañeros de trabajo que requieren de nosotros mucha paciencia porque se burlan permanentemente de nuestras convicciones pero debemos amarlos y orar por ellos; quizás un día por la misericordia de Dios “cambien de mente”. No tenemos dudas que Jesús murió por vos, por mí  y por ellos.

Hoy más que nunca resuenan sus palabras: “Perdónalos porque no saben lo que hacen”. Jesús no tomo venganza, ni de Judas que lo vendió, ni los apóstoles que huyeron cuando fue preso, ni de Pedro que lo negó tres (3) veces, ni de quienes le pegaron latigazos, ni de Pilatos, los Sumos Sacerdotes, los ancianos, los escribas, los fariseos, los soldados romanos que los castigaron muy duramente, ni del crucificado que se burlaba a su lado de Él.

La venganza (Respuesta con una ofensa o daño a otro recibido) ES UNA PALABRA QUE NO ESTA INCLUIDA EN EL NUEVO PACTO, no es propiedad de los musulmanes, ha existido desde que el hombre es hombre y en la Biblia encontramos muchos ejemplos: Recordamos a Sansón, un Juez de Israel con todas las posibilidades de pasar a la historia como un hombre de Dios MUY poderoso si hubiese sido obediente a la voluntad de Dios; pero termino muy mal su vida como todos los que prefieren hacer su voluntad llevados por sus deseos pecaminosos, cuando se rebeló el secreto de su portentosa fuerza y cayó preso de los filisteos quienes les sacaron los ojos, estos decidieron que debía ser un motivo de diversión en una fiesta dedicada a su dios Dagón, entonces el, que estaba recuperando sus fuerzas, rogó:

Jueces 16:28: Entonces clamó Sansón a Jehová, y dijo: Señor Jehová, acuérdate ahora de mí, y fortaléceme, te ruego, solamente esta vez, oh Dios, para que de una vez tome VENGANZA de los filisteos por mis dos ojos. De esa forma destruyó el lugar donde se encontraba y mató más filisteos de los que había matado en vida, pero la VENGANZA le costó la vida.

 Otro hecho similar que relata la Biblia lo encontramos dentro de la familia del Rey David quien tuvo muchas esposas, concubinas y muchos hijos durante su reinado de 40 años en Israel. La más conocida es Betsabe, madre de Salomón, pero hubo otras. Esta posibilidad de los reyes era admitida en la sociedad de entonces, pero era pecaminosa delante de los ojos de Dios y el pecado siempre trae sus consecuencias. Uno de sus hijos llamado Amnón violo y deshonró (es decir luego de abusar de ellas con engaños la rechazó) a su media hermana Tamar, que a su vez era hermana de otro hijo de David: Absalón. Dice la Palabra que “Y luego que el rey David oyó todo esto, se enojó mucho” 2 Samuel 13:21 pero no cuenta que tomo ninguna acción contra su hijo quizá, porque le correspondía, según la ley, un castigo (Deut.22) y entonces fue Absalón quien decidió vengarse por su cuenta. Esperó dos años, pero finalmente lo hizo; cómo? Invito a una fiesta familiar a todos sus hermanos  y ordenó a sus siervos que lo vigilaran especialmente a Amnón; en cuanto observaran que “el vino lo alegrara”, debían matarlo y así lo hicieron. Como terminó todo: con Absalón huyendo y una gran tragedia familiar.

Notemos hermano que en ninguno de los dos casos la venganza nació en el corazón de Dios como quiere la sociedad hacernos creer. Son “fanáticos religiosos” dicen. No es así, son asesinos que no conocen a  Dios debemos decir. Estas acciones provienen de decisiones personales por raíces de amarguras que todos los cristianos podemos hacer crecer en nuestro corazón cuando dejamos las enseñanzas del Señor y que quizás no maten físicamente al hermano o al prójimo, pero lo dañan con el rencor, el chisme, la indiferencia, etc., etc., etc.

Para concluir con el mensaje veremos la enseñanza de Jesús sobre el tema con una experiencia que tuvo con dos de sus discípulos relatada en Lucas 9:51-56.

“Cuando se cumplió el tiempo en que él había de ser recibido arriba, afirmó su rostro para ir a Jerusalén.

Y envió mensajeros delante de él, los cuales fueron y entraron en una aldea de los samaritanos para hacerle preparativos.

Mas no le recibieron, porque su aspecto era como de ir a Jerusalén.

Viendo esto sus discípulos Jacobo y Juan (luego llamado el apóstol del amor), dijeron: Señor, ¿quieres que mandemos que descienda fuego del cielo, como hizo Elías, y los consuma?

Entonces volviéndose él, los reprendió, diciendo: Vosotros no sabéis de qué espíritu sois;

porque el Hijo del Hombre no ha venido para perder las almas de los hombres, sino para salvarlas. Y se fueron a otra aldea”.

Este pasaje marca en Lucas el inicio del fin del ministerio de Jesús en Galilea, el norte de Israel; es un momento clave en la vida de Jesús. A pesar de que Jesús sabía que enfrentaría persecución y muerte en Jerusalén, siguió adelante sin vacilar y nos dio una gran clase de tolerancia. Esa clase de determinación debiera caracterizar nuestras vidas también. Cuando Dios nos traza la línea de acción, debemos seguir adelante sin variar nuestra determinación, sin importar los riesgos potenciales que nos esperen.

Después que Asiria invadió Israel, el reino del norte, y lo reestableció con su gente, la mezcla de razas se llegó a conocer como samaritana. La «pura raza» de judíos odiaba esta «mestiza» de samaritanos, en recompensa, estos también odiaban la judía. Surgieron muchas tensiones entre ambos grupos, a tal grado que los viajeros judíos que iban de Galilea a Judea desde el sur, a menudo preferían caminar dando un rodeo para no atravesar el territorio samaritano aunque esto prolongaba mucho más su viaje. Jesús no mantuvo esos prejuicios y envió mensajeros para preparar las cosas en una aldea samaritana. Sin embargo, rehusaron recibir a estos viajeros judíos.

Cuando los samaritanos rechazaron a Jacobo, Juan y el resto de los enviados, los dos primeros no solo quisieron sacudir el polvo de sus pies como Jesús les había indicado (Lucas 9:5). Quisieron tener su propia venganza al pedir que cayera fuego del cielo sobre la gente, así como Elías hizo con los siervos de un malvado rey de Israel (2 Reyes 1). Cuando otros nos rechazan o se burlan, quizás también sintamos lo mismo. Sin embargo, debemos recordar que el juicio pertenece a Dios y no debemos esperar que El use su poder para materializar nuestros deseos de venganza. Alguien dijo “recuerda al tratar de hacer algo, que alguien no piensa igual que tu”. Nuestra tolerancia debe basarse en el amor y no en la indiferencia. No somos tolerantes porque no nos importa el otro, sino porque le amamos.

Volviendo a la expresión de Jesús: Las personas que cometen estos asesinatos saben de qué espíritu son? Se puede atribuir a fanatismo religioso los atentados terroristas? O son hechos políticos enmascarados por la devoción a Mahoma o a quien se trate? Nosotros sabemos que nuestro espíritu y nuestras acciones solo deben pensar en la misericordia y el amor?. Todas estas preguntas debemos hacernos para entender la situación mundial y los tiempos que se aproximan. Como dije al principio creo que el reloj de Dios está apurando el paso. JESUS VUELVE.

Que cuando ello ocurra, nos sorprenda sirviéndole como Él lo disponga según nuestros dones, sin olvidar lo que el Señor nos dice en su Palabra: Romanos 12:19: “No os venguéis vosotros mismos, amados míos, sino dejad lugar a la ira de Dios; porque escrito está: Mía es la VENGANZA, yo pagaré, dice el Señor”. Devolvamos por el mal el bien y el Señor se ocupará de todas las cosas. Dios les bendiga.