9 diciembre, 2014

Misión de Juan según el Benedictus


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En los primeros siglos de la fe cristiana, había en Roma unas festividades horribles en honor a Saturno, el dios pagano de la agricultura, eran llamadas saturnales, se celebraban durante una semana en la segunda quincena de diciembre. La leyenda decía que a Saturno lo habían echado del Olimpo y que se estableció en el Lazio.
¿Qué hacían sus adoradores? Esta fiesta degradante hacía que por ese tiempo los esclavos mandaban a sus amos, se vivía de noche y se dormía de día y se cometían excesos sexuales por la homosexualidad.
Los cristianos decidieron hacer una fiesta contestaría a tanta locura para recordar el nacimiento de Jesús, que por supuesto sabían que no había nacido el 25 de diciembre. En esta celebración, se proponían agradecer a Dios por la encarnación, y la nueva vida en Jesús, y practicar la santidad. No se sabe la fecha exacta, pero la Biblia Textual basada en los turnos de servicio de los sacerdotes (en especial Zacarías) se puede calcular como que fue octubre.
En el siglo IV de la era cristiana incorporan al calendario de la iglesia los primeros 4 domingos anteriores a la Navidad, y lo llaman tiempo de Adviento (o llegada).
En la tira televisiva Los Simpsons, Barth dice: “Hay que rescatar la verdadera razón de la Navidad: Es el nacimiento de Papá Noel”.
Estamos viviendo un tiempo desafiante donde está ocurriendo la jibarización de la Navidad. Se está empequeñeciendo su significado, y se está dando más importancia a lo periférico que a lo esencial, que es que Jesús llegó al mundo para salvarnos.
Veamos Lucas 1. Alrededor de la Navidad hay 4 cánticos, en Latín: El Magníficat, (1:67-80) el Nunc dimittis, (2:29-32) Benedictus, y el Gloria In Excelsis Deo (2:14).
Hoy vamos a ver una parte del Benedictus, que es el cántico de Zacarías, quien recibe el anuncio que va a ser padre en su vejez, el Benedictus está en Lucas 1:67-79
La historia de la Navidad es una historia de visitas, y vos podés mirar todas las visitas que se hicieron, porque es una historia que comienza con una gran visitación al principio, una historia de visitas, donde Dios visita a la virgen María, y le dice lo que va a suceder; y antes de visitar a la virgen María está esta visita a Zacarías, esas visitas previas, anticipan la otra gran visita, que es la visita de la Navidad.
Dios visitó en primer lugar a un matrimonio viejito, el de Zacarías y Elizabeth, que estaba viviendo los últimos años de su vejez.
Zacarías era un hombre que por herencia, había nacido para ser sacerdote, quiere decir que ejercía en el templo de Salomón como sacerdote, no era nada excepcional, en ese momento había más de 24 mil sacerdotes, lo que quiere decir es que, había un superávit tremendo de sacerdotes que ya no sabían dónde meterlos.
Era muy común encontrarse con un sacerdote, se había casado con Elizabeth, una gran mujer, temerosa de Dios, pero no tenían hijos porque su esposa era estéril, ahora, los judíos cuando alguien no tenía hijos, decían que había una maldición de Dios sobre la vida de la persona, y si era un sacerdote, se decía que ese sacerdote podía oficiar, pero no podía comunicarse con Dios, estaba incomunicado con Dios.
Cuando alguien veía a Zacarías oficiar en el santuario, no podía esperar absolutamente nada, está incomunicado con Dios, pero hay que dejarlo porque pertenece a la familia, pero este no tiene comunicación con Dios.
Pero Dios lo visitó a Zacarías, y el ángel le dijo: “Tu oración ha sido oída”, Lc 1:13 quiere decir que había un clamor silencioso en el corazón de este hombre, que todos los días se abría a Dios y preguntaba: ¿Por qué tenía que ser menospreciado por un hecho del cual no era culpable? ¿Por qué el pueblo tiene que murmurar a sus espaldas: este hombre está incomunicado con Dios, porque tiene una maldición? Pero Dios lo estaba escuchando, y Dios lo visitó, y lo visitó justamente en su vejez para decirle: Van a tener un hijo; y esto era un milagro, la oración había sido oída.
Dios visita a un hombre que está viviendo una crisis histórica, porque esto ha marcado toda su vida, y lo visita para bendecir su vida, no viene para destrozar el matrimonio, no viene para deshacerlo, viene para darle la bendición a su vida.
Esta canción se conoce comúnmente como el Benedictus, por la palabra con que empieza en la versión latina.
La primera parte (vv. 68-75) trata de la salvación que está a punto de llegar en la persona del Mesías, el hijo de María. La redención que trae consigo es una visita de Dios, una intervención directa; el levantamiento de un poderoso Salvador (Ezequiel 29:21).
La segunda parte del cántico (vv. 76-79) se relaciona con el ministerio profético de Juan como precursor del Mesías.
Lucas 1:76-79 “Y tú, niño, profeta del Altísimo serás llamado; Porque irás delante de la presencia del Señor, para preparar sus caminos; 77 Para dar conocimiento de salvación a su pueblo, Para perdón de sus pecados, 78 Por la entrañable misericordia de nuestro Dios, Con que nos visitó desde lo alto la aurora, 79 Para dar luz a los que habitan en tinieblas y en sombra de muerte; Para encaminar nuestros pies por camino de paz”.
Para todos los que ejercieron el llamado de Dios para sus vidas en el pasado, los de hoy; y para los que lo harán en el futuro, todos cumplimos con las cinco razones que el llamamiento tiene de manera general:
1. Para dar conocimiento de salvación a su pueblo (v 77). Sin duda alguna que en cuanto a la salvación, a su costo y a sus formas; el hombre no sabe nada. Pero en cuanto al conocimiento de la salvación es indiscutible que ese tiene que venir de Dios. No podemos encontrar la salvación en las cosas de nuestro mundo, porque no hay nada en este, por lo cual, podamos acceder a la salvación.
¿Qué es la salvación? Salvación no es sacar al hombre de la tierra y llevarlo al cielo; es sacar a Dios del cielo y que venga al hombre. Esa es la diferencia. Mucha gente, cree que la salvación es que sus pecados sean perdonados para poder ir al cielo. El que sus pecados sean perdonados, es preparación para la salvación. Ir al cielo es un subproducto de la salvación, salvación es tener a Dios de regreso en tu corazón. Hay muchos que no quieren saber nada de la salvación; otros la quieren, pero quieren que sea a su manera, en su tiempo, pero mucho me temo que la salvación no está para ser discutida por el hombre.
¿Qué es lo que le da autenticidad al evangelio? Salvación y evangelio son dos palabras vinculadas estrechamente (Romanos 1:16). No hay salvación sin el anuncio del evangelio. ¿Cómo podemos discernir si es o no el genuino evangelio?
Pablo nos da al respecto tres importantes puntos:
1) La prueba de la provisión. Origen: ¿De dónde proviene? Gálatas 1:11-12 dice: “Más os hago saber, hermanos, que el evangelio anunciado por mí, no es según hombre; pues yo ni lo recibí ni lo aprendí de hombre alguno, sino por revelación de Jesucristo”.
El evangelio no es el invento de ningún hombre. No es algo que de pronto a Pablo se le ocurrió, sino una revelación divina, y Pablo dice que fue una directa y divina revelación, el verdadero evangelio proviene de Dios mismo. ¿Quiénes somos nosotros como para decirle a otros, lo que es bueno o malo? ¿O es que no hay un Dios que ya haya hablado? Pablo dice: Este evangelio no lo aprendí de los hombres, ni de mis amigos, el evangelio es autenticado por la fuente de la cual proviene.
2) La prueba del mensaje. Base o fundamento: ¿Cómo somos salvos?
Gálatas 1:6-7. «Estoy maravillado de que tan pronto os hayáis alejado del que os llamó por la gracia de Cristo, para seguir un evangelio diferente. 7 No que haya otro, sino que hay algunos que os perturban y quieren pervertir el evangelio de Cristo».
Cualquier evangelio que no sea el evangelio de la gracia, no es el genuino evangelio ¿Cómo somos salvos? Efesios 2:8 dice: “Porque por gracia sois salvos por medio de la fe y esto no de vosotros”. ¿Cómo somos salvos? Por la gracia de Dios traída por Cristo en la Cruz, y cuando él la completó, nadie puede quitar nada de ella, nadie puede añadir algo a ella, porque es el trabajo sobrenatural de Dios.
3) La prueba del personaje. Personaje central: ¿Quién es? El Señor Jesucristo es el Personaje central del evangelio, el evangelio es acerca del nacimiento, vida, milagros, entrega, muerte, resurrección, y ascensión de Cristo, eso es el evangelio, la vida y la muerte de Jesús por nuestros pecados, Él es el personaje central del evangelio, no es un evangelio que hace referencia a él, sino que, se centraliza en Jesucristo.
¿Qué es el evangelio? Es el evangelio de la gracia de Cristo.
¿Qué es la salvación? La salvación no es una iglesia, ni una religión, ni un credo, ni una causa, es una persona que se llama Jesucristo.
¿Sabés porque tenemos tanta confusión religiosa en el mundo? Porque la gente acepta credos, no a Cristo; se unen a una iglesia sin conocer a Jesús, la salvación no es creer en algo, es recibir a Alguien, la fuente del genuino evangelio es Dios, la salvación es únicamente por gracia; el Personaje del evangelio es Jesucristo, y la Biblia dice, que Jesús no es un buen camino al cielo, sino que es el único camino al cielo. Hechos 4:12, «En ningún otro hay salvación porque no hay otro nombre bajo el cielo dado a los hombres en que podamos ser salvos».
Jesús es el único camino al cielo, Lo siento muchísimo, esa es la verdad de Dios; cualquier otro evangelio es un evangelio falso, y la ira y el juicio de Dios caerán.
Si alguien me pregunta: ¿Estás seguro de que irás al cielo? Sí, parecés que tenés mucha confianza, no, ahí es donde se equivoca, esa es la forma en que sé que voy a ir al cielo, no teniendo confianza en mí mismo,

2. Para otorgar perdón de pecados. Habían pasado por lo menos 1250 años de que la ley había sido dada a Moisés, en el desierto, para que cuando llegaran a la Tierra Prometida tuvieran una norma de vida que seguir. La palabra ley, viene de tora y es enseñanza, la ley le fue dada al pueblo de Israel para ensenarles a vivir.
Este pueblo aprendió a vivir por la ley, y luego la ley les fue indiferente, podían cumplir con la solicitud de la ley y seguir siendo las mismas personas después de haber pagado por su culpa.
A partir de Juan, era anunciada una nueva forma de vivir, ahora, no sería necesario sacrificar al animal, ahora sería necesario sacrificarse ellos mismos, con la rutina del sacrificio de animales, se habían olvidado de algo muy importante como lo era el arrepentirse de sus pecados. ¿Cuál fue la prédica de Juan?
“El siguiente día vio Juan a Jesús que venía a él, y dijo: He aquí el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo” Juan 1.29
“Y diciendo: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado”, Mt 3:2
Pavlov fue el famoso fisiólogo ruso, que experimentó con sus perros a quienes les tocaba una campanita antes de darles de comer, y siempre los perros salivaban, se les hacía agua la boca, lo que hoy se conoce como reflejo condicionado, ¿Qué es lo que Dios hizo en el Antiguo Testamento con todos los sacrificios, comenzando con las pieles para Adán y Eva? Estaba preparándolos con un reflejo condicionado. Cuando veían la sangre, sabían que el pecado significaba muerte.

3. Para dar luz a los que habitan en tinieblas. Vivimos en un mundo donde las tinieblas dominan el corazón de las gentes. Y esta la razón por la cual muchas de las acciones de las personas son escondidas, porque no son dignas de ser sacadas a la luz. Sin embargo uno de los propósitos de quien anuncia el evangelio, es nada menos que alumbrar con la luz de Dios. La luz del evangelio alumbra, ¿A quiénes?
Jesús es la luz del mundo. Luz que muestra la gloria de Dios y manifiesta su naturaleza. Juan 1:1-12. Una de las más tristes experiencias de la Segunda Guerra Mundial ocurrió en el Atlántico Norte, cuando un gran portaaviones envió a cinco de sus aviones piloteados por los cinco mejores pilotos que poseía, debido a que había submarinos enemigos merodeando el lugar. El capitán de la embarcación dio una orden apremiante, que se apagaran todas las luces de la nave. Al poco tiempo de esta orden, los cinco aviones regresaron de la misión sin haber avistado a los enemigos.
Al conectarse por radio, le piden al operador que les enciendan una luz, el operador, le contestó: “Lo siento no puedo”. Otro piloto rogó: “Solo denme algo de luz”. Otro suplicó: “Dennos solo una luz para poder encontrar el camino”. El operador de radio dijo: “Lo siento, no puedo” y apagó la radio. Los pilotos y sus aviones cayeron a las frías aguas del Atlántico porque no pudieron encontrar el camino y pasaron a la eternidad. Mantenga en su memoria esta historia, mientras leemos Juan 1:1-12. Leemos que la vida de Jesús era la luz de los hombres. Juan está hablando de Jesús, la luz del mundo. Como esos pilotos buscaban desesperadamente una luz para encontrar el camino. Nuestra luz, la de la humanidad, vino al mundo en Belén. La Navidad nos habla de la luz. El villancico que es tan famoso, “Noche de Paz”, su tema no es la noche, sino la luz que en esa noche brilló con todo fulgor, la luz de Jesús. Otras canciones nos hablan del sol de justicia. Jesús es luz y vida para todos los hombres.
a. A los que habitan en tinieblas. Son las tinieblas las que esconden los hechos más despiadados. Y estas no solamente son las que ocurren cuando llega el fin de un día, sino que son las que se encuentran en las profundidades del corazón. Es una gran necesidad en la vida del hombre el que la luz de Dios llegue a nuestro corazón, de lo contrario terminaremos viviendo en las sombras, y haciendo actos que pertenecen a un ser oscuro. Isaías 9:2, 6-7; Lucas 2:32.
b. Y en sombras de muerte. Tendremos que decir que la muerte, son aquellos caminos compulsivos, caminos donde hay derramamiento de sangre, caminos violentos, caminos del abuso, donde no solamente se pierde la vida, sino que incluso se pierden las esperanzas.
La luz no se contamina, la luz es constante, (Sgo 1:17, Mal 3:10, He 13:8); la luz es victoriosa, vence las tinieblas (Juan 3:5).
4. Para encaminar nuestros pies. Esta es una imagen realmente impresionante, este es uno de los reflejos del Padre. Esta es la conducción que todos necesitamos en la vida. Que alguien encamine nuestros pies, solo que necesitamos alguien que nos quiera llevar por el buen camino. Hay muchos que querrán llevarnos por los caminos de sus propias conveniencias, muchos de ellos pertenecen a la religión. Pero quienes han sido encaminados por Dios no solo tienen un buen lugar por donde caminar, sino que su final es un final placentero, es un final de bien al cual todos queremos llegar, Lucas 3:5-6. Pero para esto es necesario ser encaminado por Dios. Isaías 57:19-21, Proverbios 3:6; Salmo 119:105.

a. Por camino de paz. Que hermoso es vivir confiado, y en un lugar donde reine la paz, donde no peligre la vida, donde podemos reposar tranquilamente sabiendo que nada hay que amenace nuestra seguridad. Cuando la vida no esté en peligro, se puede decir que se vive en paz. Y lo que Dios nos llama a hacer a nosotros es nada menos que proclamemos el mensaje de que la vida puede reposar confiadamente en las manos de Dios. Pero no es una tarea fácil, requiere del ejercicio de la fe, y que andemos por los caminos de la paz de Dios en los cuales no existe el temor.
Andar por los caminos de la paz. Paz en hebreo no quiere decir solamente ausencia de guerra, sino todo lo que comprende el sumo bien del hombre. Y por medio de Cristo se le capacita al hombre- para andar por los caminos que conducen a todo lo que significa vida, y ya no a todo lo que significa muerte.
Paz, es eirene Strong #1515: Compare «irénico» (conciliador) e «Irene». Un estado de reposo, quietud y calma; una ausencia de lucha; tranquilidad. El término generalmente denota un bienestar perfecto. Eirene incluye relaciones armoniosas entre Dios y los seres humanos, entre las personas, naciones y familias. Jesús, como el Príncipe de Paz, da paz a aquellos que le invocan en busca de salvación personal.

5. Para preparar sus caminos. Hoy Dios nos pone frente a nosotros, la oportunidad de ser para otros quienes les mostremos el camino hacia Dios. Vos tenés muchos conocidos y sin duda llegará el momento en el que ellos sentirán la necesidad de Dios, especialmente durante la desgracia, y espero que para entonces vos ya tengás un camino recorrido que les pueda mostrar a ellos.
Ser llamado al ministerio no es ser llamado a ser la estrella, o a vivir en la prosperidad. Es un llamado que implica la sencillez, que no promete una recompensa financiera. El llamado a la pronunciación del evangelio conlleva dolor, sufrimiento, desprecio, burla, austeridad y la obligación a renunciar a las cosas personales para hacer aquellas, que son un bien para muchos en lugar de ser un bien personal.
Por eso muchas veces quien es llamado al ministerio, se decepcionado del ministerio, porque la carencia de cosas viene a ser muchas en muchas ocasiones algo cotidiano durante el ministerio. Las razones del ministerio van más allá del entendimiento, porque es la manera en la cual a Dios le placido que su evangelio sea proclamado.
Dios visitó en la Navidad a todos los hombres, ¿Qué es la Navidad? Es la visita de Dios a todos los hombres, es que Dios se acerca a toda la humanidad, no es ya Dios visitando un matrimonio, ni es Dios visitando una mujer, es Dios visitándonos a todos nosotros, cuando el ángel le anuncia a los pastores les dice: Les traigo nuevas de gran gozo, que van a ser para todo el pueblo, que ha nacido en la ciudad de David un Redentor, es decir, para todo el pueblo, es una visita que Dios hace para todos nosotros.
El espíritu de la Navidad, no el clima de la Navidad. El clima es algo exterior, que se logra con la presión exterior, lo logra la propaganda en la televisión, o cuando vas al supermercado y ves las bebidas clásicas, y los adornos, pero el espíritu es otra cosa, es el aliento interior de las cosas, es lo que mueve las cosas, y a veces, en estos momentos confundimos lo que es el clima, que es un clima consumista en el fondo es un clima consumista, con lo que debe ser el espíritu de la Navidad, y nos cuenta captar el espíritu de las cosas, a veces nos sumergimos en un clima, y no nos damos cuenta, ¿cuál es el espíritu que maneja ese clima? Esto vale para muchas cosas, no solo para la Navidad puede crear un clima, sumergir a la persona, y el espíritu que lo está moviendo es diferente.
Por eso la iglesia en sus comienzos llamaba el tiempo de Aviento a los domingos previos. Es Filipenses 2, lo que marca el espíritu de la Navidad.
Bibliografía: Pastor Th. B. Samuel Que Por el firme propósito de servir, Llamado Ministerial, Salvador Dellutri en “Los Grandes Temas”, y otros varios.

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