¿Por que existe Juan 21? Parte I
Por: Carlos Amarillo
¿Por qué está Juan 21 y Juan no concluye en Juan 20?
Juan 20 contiene el punto culminante del evangelio de Juan es Juan 20:28, la declaración de Tomas: “¡Señor mío y Dios mío!” Juan toma la declaración de su compañero para concluir lo que fue toda su intención, mostrar al Mesías como el verdadero Dios: “¡Señor mío y Dios mío!” Juan 20:30-31 “Hizo además Jesús muchas otras señales en presencia de sus discípulos, las cuales no están escritas en este libro. 31 Pero éstas se han escrito para que creáis que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y para que creyendo, tengáis vida en su nombre”.
En todo su evangelio ha mostrado ese propósito, ha mostrado el testimonio propio de Jesús, todos los Yo soy, que son frases incompletas, que siguen, las señales que Jesús era el que decía ser, con el desfile de milagros que encontrará en el evangelio de Juan, el cual menciona literalmente 7 milagros, que son más que milagros. De hecho la palabra utilizada para describir, es una palabra que se traduce como señal, es decir, es un milagro con mensaje, es una señal con importancia, con significado, lo dice en Juan 20:31, su resurrección, que Jesús es el Hijo de Dios, el Verbo encarnado ya ha descripto 2.
El evangelio, como buenas noticias termina en el capítulo 20.
¿Por qué existe Juan 21? si parece que con la conclusión de Juan 20 está TODO DICHO. Razones:
1) Como existe un prólogo, debe haber un epílogo. Juan 1:1-18 es el prólogo, y estructuralmente debe tener un epílogo, prólogo y epílogo, ¿En qué se diferencian?
El prólogo son palabras que va al comienzo de una obra, ya sea por el autor del texto para explicar, entre otras cosas, porqué escribió la obra que vamos a leer, es decir, cuál fue el objetivo que tuvo este autor para escribir su obra, y también para anticipar ideas de lo que vamos a comenzar a leer.
También el prólogo puede ser escrito por otra persona, generalmente para elogiar la obra en sí y su autor. En cambio el epílogo es un escrito breve que aparece al final de la obra, ya sea una obra literaria o científica y es usada como un pequeño resumen o compendio del texto leído, y está escrito por el mismo autor.
El prólogo, nos enseña que el Señor es el Verbo encarnado, Juan 21 intenta responder preguntas muy importantes en torno a los discípulos, el prólogo muestra a Jesús antes de comenzar el ministerio, y el epilogo en Juan 21 después que ha terminado su obra redentora.
2) Como continuaría la relación de Jesús con los suyos. Y muestra el cambio de paradigma, paradigma es modelo, ejemplo: Hasta el fin del judaísmo el modelo era alrededor del templo, y era: VENGAN; ahora el nuevo modelo es: VAYAN. ¿Cómo sería a partir de ahora la relación de Jesús con sus discípulos?
Ellos siguieron a Jesús a sol y sombra por 3 años, se asombraron con la alimentación milagrosa, como tuvieron que despertarle cuando la tormenta iba a hundir el pequeño barco, cuando respondió preguntas capciosas, ¿Y ahora? ¿Cómo dirigiría? ¿A control remoto? El epilogo intenta responder los nuevos términos del caminar juntos. ¿Cómo tomarían sus decisiones? (Quien reemplazaría a Judas por ejemplo) ¿Jesús estaría tan cerca cómo antes? ¿La relación con Jesús se interrumpiría? Hum… Había dudas. Para eso Juan escribe el epilogo, el Espíritu vino a ellos en Juan 20, pero estaban sin ser llenos del Espíritu.
En la vida cristiana hay solo dos caminos, uno el que marca y se sigue el verdadero norte que apunta a Jesús y el otro que marca otra dirección, uno nos acerca a Dios y el otro nos aleja. La obediencia y la desobediencia, la intimidad y la lejanía; la madurez, y la inmadurez.
Estos dos caminos están ejemplificados en Juan 21:1-14,
Leamos en Juan 21:1-14 “Después de esto, Jesús se manifestó otra vez a sus discípulos junto al mar de Tiberias; y se manifestó de esta manera: 2 Estaban juntos Simón Pedro, Tomás llamado el Dídimo, Natanael el de Caná de Galilea, los hijos de Zebedeo, y otros dos de sus discípulos.
Después de esto. Luego del 8 día de la Resurrección (última manifestación del Señor) y antes del día 40 que ascendió. En Juan 21:14 dice “Esta era ya la tercera vez que Jesús se manifestaba a sus discípulos después de haber resucitado de los muertos”.
No nos dan los números, ¿por qué?
Se había manifestado a María Magdalena, a los de Emaús, a las mujeres, ya no es la tercera. Pero acá dice “a sus discípulos”, como un cuerpo colegiado. Ellos se fueron de Jerusalén a Galilea. No está mal que ellos estén en Galilea, porque Jesús les había dicho que fueran allá, vea Mateo 28:10. ¿Pero era el lugar correcto dentro de Galilea, la provincia del norte?
En Mateo 28:16, lugar específico, dice “Pero los once discípulos se fueron a Galilea, al monte donde Jesús les había ordenado”. No era el mar, era el monte. NO son parecidos.
3) Para enterarnos de la restauración de Pedro. No está en otro evangelio. El discipulado es un proyecto de vida donde el Señor pide una transformación interna de la persona, ¿Qué pasó con Pedro? ¿Cómo es que encontramos después del evangelio de Juan a Pedro cumpliendo una función de liderazgo al interior de la iglesia, si había caído tan horrible, negando al Señor tres veces? ¿Cómo es posible que Pedro esté en esa posición de autoridad, y predicando en Pentecostés?
a. Pedro 6 meses antes de la cruz, llega a un punto destellante cuando dice por indicación del cielo: “Tu eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente”.
El fundamento del discipulado es el Señorío de Cristo, Él es el que manda y yo el que obedezco.
Pedro fue atrapado por la soberbia, luego de “hacer cumbre”, la soberbia es la madre de todos los pecados como decía Agustín, y casi llega a destruir a Pedro, es decir, esos 6 meses donde él dejó crecer la soberbia en su vida, lo llevó a una crisis final terminal.
b. Una semana después, ¿Dónde está una semana después? En el Monte de la Transfiguración, y allí Jesús llama a los tres discípulos, y Jesús se transfigura delante de ellos y conversa con Moisés y Elías hablando del Éxodo, de la partida, de la salida, de la muerte, de lo que va a venir, y lo hacen delante de los discípulos; y en ese momento, abre la boca Pedro y dice: Señor, es mejor que nos quedemos aquí, están hablando de la partida, de ir a Jerusalén; de la redención, pero la soberbia en Pedro, ha empezado a crecer y tiene un mejor plan, es quedarse allí. ¿Qué es eso de morir? Levantamos tres pabellones hacemos fiesta, él se levanta contra el plan de Jesucristo, y Pedro los está deteniendo, y cuando llegan a la última cena, estando ya en Jerusalén.
c. En la última Pascua, Jesús les dice que se va cumplir la profecía de Zacarías, herirán al pastor y las ovejas serán dispersas, Mateo 26:31-33. Pedro dice que no va a ser así, aunque todos te nieguen yo no.
d. Llega el Getsemaní, Pedro se lleva dos espadas, para defender al Maestro, y usa la espada para intentar matar a un siervo. Que lejos ha llegado. La soberbia produce frutos en nuestras vidas y en nuestros corazones, y Pedro le seguía de lejos
e. La noche más oscura, cuando se lo llevaron a Jesús preso; y entra al patio por mediación de Juan que conocía al Sumo Sacerdote; y Mateo 26:58 dice: “Mas Pedro le seguía de lejos hasta el patio del sumo sacerdote; y entrando, se sentó con los alguaciles, para ver el fin”, ¿Para qué? Para ver el fin. Es el hombre que ha perdido la fe totalmente en el Maestro.
Y Pedro que está en el patio calentándose en el fuego enemigo, y tres veces lo vinculan con Jesús, ¿No eres tú también de los discípulos de este hombre? ¿No eres tú de sus discípulos? ¿No te vi yo en el huerto? ¿Qué dice Pedro? No soy; está negando ser un discípulo, fue el corolario de una maratón de desobediencia, desconoció el Señorío de Jesús, no es más discípulo.
Y lo dijo, y por eso no mintió. ¿Por qué? Porque un discípulo es el que aprende del Maestro, y lo practica, pero Pedro hace 6 meses que dejó de aprender; y seguía ocupando su lugar pero era una figura decorativa, seguía haciendo de las suyas, hablando y liderando; pedaleaba en el aire, Pedro dejó de aprender.
El gallo canta y Pedro se desmorona, y llora.
Llora la oportunidad perdida, el ministerio perdido, la vida desperdiciada, llora las ilusiones perdidas, llora la esperanza perdida, y llora el discipulado perdido.
Hace aproximadamente 6 meses que está siguiendo su propio camino.
f. El irse a pescar fue el último desliz o acto de infelicidad. Juan 21.
¿Quiénes son los 7 que Juan menciona? Pedro inicia la lista y está denotando que es el líder, Tomás el que faltó a la primera cita, los dos hijos de Zebedeo (Juan y Jacobo) y Natanael, el que solo aparece dos veces en Juan 1 y 21, ¿Por qué? Para notar a quienes persisten hasta el fin, y otros dos, que son NN. En tiempo antiguo, eran 7 testigos los que daban la confirmación total de un hecho determinado.
Juan repite dos veces una palabra: Manifestó (1 y 14). Luego de la Resurrección el Señor, no permanecía en todo momento con sus discípulos, no sabían dónde vivía. Era una incógnita saber en qué momento se manifestaría ¿Y si ellos fueron a la montaña fijada y no pasó nada? No eran apariciones a la carta, si el tiempo pasó, la impaciencia los comió. Pensaron: Esto se terminó, estamos en libertad de acción, hagamos lo que podamos con lo que tenemos. Tres años de instrucción ya es suficiente. Ya es mucha la teoría, ahora viene la práctica. Se necesita poder para vivir la Palabra de Dios el conocimiento envanece.
3 Simón Pedro les dijo: Voy a pescar. Ellos le dijeron: Vamos nosotros también contigo. Fueron, y entraron en una barca; y aquella noche no pescaron nada.
Pedro se sentía con derecho de tomar la batuta, y lo que mejor se le ocurre es volver a la pesca y lleva a los otros, algunos sabían algo de eso, pero otros no. Se inician las dificultades, de ninguna manera se resuelven, actúan por su propia cuenta, y eso no es la vida cristiana plena.
Esta expresión voy a pescar, ¿Es desobediencia o como no tenían que comer hacen esto naturalmente? Era ir en contra de la orden clara de Jesús y contagió a otros. Es desobediencia.
¿Por qué el Señor utiliza a gente tan frágil como Pedro y como nosotros, pecadores, para sus labores importantes? Porque no hay otros. No era mientras viene el Señor, es una clara dirección en contra de la orden que Jesús le ha dado.
Voy a pescar es hacer lo que no correspondía, la autoconfianza no es buena consejera en el camino de las decisiones, te lleva por la desobediencia. Aun la noche que es la mejor hora para pescar no dio resultado, Salmo 127. Cuando perdemos el verdadero norte, nada resulta, y la vida se frustra, nos invade de dolor, la desazón, y la desesperanza. Se olvidaron de Juan 15:5, “Separados de mi nada podéis hacer”. Toda mala decisión conduce al fracaso.
En todos nosotros existe lo que llamamos “asociación de ideas”; o esto ya me pasó. Tres años atrás en el mismo lugar sucedió algo parecido, nada de pesca Lucas 5:1-11 era el llamamiento de Jesús donde Pedro dijo: Apártate de mí que soy hombre pecador.
Ya frustrados ven de lejos y en la playa un hombre desconocido, que les está esperando.
4 Cuando ya iba amaneciendo, se presentó Jesús en la playa; más los discípulos no sabían que era Jesús.
¿Por qué no ven quién era? La bruma del mar, la oscuridad, el amanecer, la lejanía, eran unos 100 metros, la palabra manifestación es darse a conocer cuando Él quería, no eran solo los ojos físicos, hubo algunos que no lo reconocieron durante el ministerio terreno, es necesaria una relación de intimidad (De esto carecían)
Juan 21:5 “Y les dijo: Hijitos, ¿tenéis algo de comer? Le respondieron: No”.
“¿Tienen las manos vacías, ¿verdad?” (Respuesta implícita) Huy ¿sería un reproche? Antes de ser restaurado deben reconocer que han fracasado. La comunión está quebrantada.
Ellos habían aprendido allí: Su incapacidad, su fracaso, que ir en contra de la voluntad de Dios no sirve de nada
Volvamos al cambio de paradigma o modelo_ ¿Cómo se vincularían con el Señor a partir de ahora? Jesús, lo anticipó en Juan 14 y 16 si me aman guarden mis mandamientos, no actúen bajo su propia iniciativa, no tenga planes humanos sin mí. Juan 15, y el fruto. Están desolados y encima un extraño los “gasta”. Y así bajoneados, reciben una orden.
6 Él les dijo: Echad la red a la derecha de la barca, y hallaréis.
¿Ofensivo o burla? Uno esperaría que no le hagan caso, pero si, le hacen caso. Había algo que recordaban cuando fueron llamados, hay autoridad de parte de este hombre
6b “Entonces la echaron, y ya no la podían sacar, por la gran cantidad de peces”.
¿Era la derecha o la izquierda o sea era el lugar equivocado? ¿Qué era lo equivocado? Era actuar independiente de Dios, dejando su guía sabia. Dejaron impacientes la montaña y se fueron al mar, pero ahora comienzan a recuperar el terreno perdido. Obedecen y hay frutos.
Juan 14:7-8 se va completando el fruto “Entonces aquel discípulo a quien Jesús amaba dijo a Pedro: ¡Es el Señor! Simón Pedro, cuando oyó que era el Señor, se ciñó la ropa (porque se había despojado de ella), y se echó al mar. 8 Y los otros discípulos vinieron con la barca, arrastrando la red de peces, pues no distaban de tierra sino como doscientos codos”.
Comienza a restaurarse la comunión, frente al sepulcro ambos actúan, Juan se queda en la puerta y Pedro es el primero en entrar. Pedro se tira al agua con ropas, actúa extraño, porque quiere ir rápido a la presencia del Señor. A pesar de sus altibajos, Pedro era un hombre mucho más grande que aquel cuando el Señor lo llamó.
9 Al descender a tierra, vieron brasas puestas, y un pez encima de ellas, y pan.
Horas sin nada, en minutos la red está llena: Él es el Gran Proveedor de todo. Ya les había enseñado: Yo os elegí a vosotros para que vayáis y llevés fruto y vuestro fruto permanezca.
10 “Jesús les dijo: Traed de los peces que acabáis de pescar. 11 Subió Simón Pedro, y sacó la red a tierra, llena de grandes peces, ciento cincuenta y tres; y aun siendo tantos, la red no se rompió”.
Pedro saca la red, los discípulos, no pudieron sacar la red, ahora Pedro solito puede. La adrenalina de la pasión por obedecer,
Juan dice que habían 153 peces, ¿Por qué ese número? Jerónimo decía que en la época de Jesús, las personas creían que solo habían 153 especies de pescados, así que el símbolo 153, lo que lo que indicaba, era la obra que iban a realizar a nivel universal de la obra del evangelio,
12 Les dijo Jesús: Venid, comed. Y ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle: ¿Tú, quién eres? sabiendo que era el Señor. 13 Vino, pues, Jesús, y tomó el pan y les dio, y asimismo del pescado. 14 Esta era ya la tercera vez que Jesús se manifestaba a sus discípulos, después de haber resucitado de los muertos”.
Es el relato más extendido que tenemos sobre una aparición del Señor. Comida es comunión, quien restaura Por el camino nuevo y vivo.
Decide recibirnos a pesar de nuestra torpeza. Intimidad con Dios, depender de su guía, vivir bajo su voluntad es una muestra de la intimidad con Dios.
Los llama ser pescadores a nosotros también. Ya los romanos la usaban, se debían capturar hombres a una verdad expuesta, hay una gran diferencia, el pescador cristiano saca pescados muertos, para que tengan vida.
El verbo se manifestó, “se mostró” o literalmente “manifestó a sí mismo”, muy común en los escritos de Juan (ver 7:4 “manifiéstate al mundo”, se repite en este versículo y se refiere a una aparición. Este verbo se refiere a Dios o a Cristo frecuentemente en el NT. Hasta ahora Jesús había manifestado su gloria, pero ahora se manifiesta a sí mismo en su estado glorificado. Nótese que esta sección comienza y termina con esta expresión (v.14). Vincent acota que en las múltiples referencias donde se usa este verbo no sólo apela a los sentidos físicos, sino se dirige a la percepción espiritual y contempla un efecto moral y espiritual. Beasley Murray, Morris y otros opinan que todo el versículo tiene el efecto de anunciar un tema: “Jesús se manifestó”. Los discípulos estaban en Galilea en obediencia del mandato de Jesús (ver Marcos 14:28;16:7).
1) Jesús se manifestó de improviso. A veces los discípulos fueron convocados o conducidos para tener una manifestación del Jesús resucitado. Tal fue el caso de la montaña de Galilea (Mateo 28), o en el monte de los Olivos en Hechos 1. Pero en Juan 21 Jesús aparece de improviso. Antes se había revelado un día domingo, ahora es un día cualquiera de la semana, y no a todos, sino a un grupo especial de 7 discípulos. En esa lista aparece Natanael que es el único evangelio que lo nombra. Tomás el que dudó, (Dídimo es mellizo), ahora está incorporado de nuevo al grupo.
2) Jesús se manifestó a su debido tiempo. “Cuando iba amaneciendo, se presentó Jesús en la playa”. Juan 21:4. En el mejor momento para que se manifieste a los suyos, cuando más desanimados estaban, se sentían desorientados, habían perdido el norte, la brújula la pesca es mucho más productiva de noche, y cuando el día viene, ya no pasa nada, y además Pedro y otros pescadores antes de seguir a Jesús lo hacían de noche porque así tenían para vender pescado fresco al otro día. Esta vez Jesús no anda sobre las aguas (Mateo 14:22-33), El esperará en la orilla o ribera. El evangelio de Juan es muy simbólico. En las tormentas de la vida, cuando la travesía se hace difícil, El trae su consuelo, viene a nuestro encuentro. Pero también es cierto que El nos espera en la orilla, y nosotros nos acercamos a El. Hoy estamos 24 horas más cerca de nuestro encuentro con El, porque estamos más cerca de la orilla. El es el final de la travesía.
3) Jesús se manifestó gradualmente. Juan 21:4b, dice: “…no sabían que era Jesús”. Cristo está más cerca de lo que imaginamos. El es el Dios que siempre está. Recordemos la experiencia de Jacob, en Génesis 28:16-17. Ciertamente Dios está en este lugar y yo no lo sabía. Tuvo miedo y dijo: ¡Cuán terrible es este lugar, no es otra cosa que casa de Dios, y puerta del cielo! El nombre Jehová significa: “Yo soy y Yo estoy”. ¿Por qué no reconocieron a Jesús? Estaba demasiado lejos, era todavía oscuro o había una neblina muy común en aquellos lugares.
4) Jesús se manifestó para darles una prueba de su compasión. Juan 21:5, usó la palabra “hijitos”. Palabra que Juan no olvidará, es una PALABRA AFECTIVA, y la usará en su epístola. Jesús preguntó: ¿Tenéis algo de comer? Se dirige a ellos como un Padre a un hijo. Le interesa lo espiritual y lo material. Porque los santos comen, beben y visten. Dios está enterado de nuestra necesidad, sin embargo quiere que se lo digamos. No solo nos da gracia abundante como dice 2 Corintios 12:9, sino alimento suficiente como dice Mateo 6:25-34. Imitemos la conducta de Jesús, tengamos interés y compasión por los necesitados. A veces los más necesitados son los que menos piden y no dan a conocer su situación. La respuesta del grupo es: No. El quería escucharlo de ellos.
5) Jesús se manifestó con una muestra de su poder divino. Juan 21:6, “Echad la red a la derecha de la barca”. Hubo obediencia. De tener las manos vacías a una pesca copiosa. ¡Y todavía no sabían que era Jesús! El experto por ahora desconocido por ellos tenía certeza donde estaba el banco de peces. Por eso ojo con creértela, o que te sabés todas las cosas. ¿Te acordás el dicho antiguo de “a papá mono con mandarinas o bananas verdes?”. Eso está bien con los monos y las frutas verdes. Para nosotros la lección es no desoír los buenos consejos. Pero al mejor cazador se le escapa la liebre. Si un hermano te habla movido por el amor y el Espíritu Santo, es como si el mismo Señor te hablara.
6) Jesús se manifestó para mostrar que El no desecha a NADIE y él tiene con cada uno un propósito: “Y estableció a doce para que estuviesen con él y para enviarlos a predicar y que tuviesen autoridad”. Marcos 2:14. Tres propósitos tenía: Estar con él: Formación, va a formar el carácter; Enviarlos: Misión; Tener autoridad: Poder. Formación, Misión poder. ¿Por qué Dios no usa a otra gente? Porque no la hay solo seres humanos quebrantados a su servicio.
7) Jesús se manifestó para enseñarle a Pedro una gran lección: Que no puede seguir a Jesús con sus propias fuerzas, Warren Wirsbe dice: “Es como si el Maestro le dijera a Pedro: Simón, fuiste débil como un cordero, errante como una oveja, y con todo en medio de todo, tu, como quería la oveja, fuiste objeto de mi tierna y amorosa solicitud, ahora con el provecho de tus experiencias, debido a tu sincero pesar, considera a los miembros de mi iglesia como tus corderos, y aliméntalos; como tus ovejas, y pastoréalas, y si como tus queridas ovejas, y al alimentarlas ámalas”. Y se dio cuenta de lo vacío de afirmar su propia lealtad, de forma tal que se apoyara más en su propio poder que en el de Jesús, igualmente hoy en día no debemos confiar en nuestras propias promesas de lealtad, pues veremos que serán traicionadas inmediatamente. Pero si ser conscientes de nuestra incapacidad, y Pedro estaba en ese preciso lugar.
Bibliografía: Comentarios varios de Espada Electrónica, de Los Grandes Temas, y otros.