¿Qué evangelio estamos viviendo?

Desde entonces…

Cuando leemos esta frase, necesariamente tenemos que trasladarnos, por lo menos al hecho anterior.

En el mismo capítulo, pero versículos previos, vamos a ver una historia muy famosa de Jesús con sus discípulos.
El Maestro, se encontraba orando, según lo relata Lucas 9 (pasaje paralelo a este) y al llegar sus discípulos por alguna razón, les va a preguntar lo que la gente decía sobre el. Cuales eran los rumores, respecto a su persona, a su ministerio.

¿Sería que el Señor no sabría qué es lo que se decía de él? Claro que conocía perfectamente los comentarios, Jesús, si bien fue 100% hombre, también fue y es 100% Dios.
Los discípulos responden; mira, hay muchos que dicen que sos Juan el Bautista, otros dicen Jeremías, Elías, algún otro profeta.

Evidentemente, las personas tenían alguna noción, alguna percepción de que Jesús tenía que ver con los espiritual de Israel, pero claramente no estaba en sus mentes.

Pero Jesús, les va a decir a sus discípulos, esta bien, ya me respondieron respecto a lo que la gente dice, pero quiero saber que dicen ustedes de mi.
Conocemos la historia no? Pedro, por una revelación del cielo, se anima a contestar, y hace una de las declaraciones más poderosas de todos los tiempos. “Tu eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente” ¿Que es lo que estaba diciendo Pedro? Jesús, vos sos el Ungido, el elegido, el que fue profetizado por Isaías, Zacarías, y todos los profetas, el que va a establecer su reino, trayendo libertad espiritual, social, cultural, política, económica, ese eres Tu, y te estábamos esperando hace mucho tiempo!!

Aca hay un punto de inflexión, hay un antes y un después, todos los discípulos a partir de ese momento tuvieron una revelación profunda de quién era Jesús, claramente les fue iluminado el corazón, para poder recibir la otra parte de la historia, respecto al plan de salvación que traería consigo el Mesías.

Por este motivo es que el versículo 21, comienza diciendo “desde entonces”, a partir de esto, es que Jesús empieza a anunciar cosas que antes no había dicho, claro, era necesario pasar este momento, había que subir un escalón más para poder ver

un poco más del Plan perfecto que ideó la Trinidad, y que fue ejecutado en la tierra por la segunda persona, Jesucristo.

Antes de que tuvieran esa charla Jesús con sus discípulos, entre muchas sanaciones, prodigios, también pudieron experimentar, dos alimentaciones milagrosas, multitudinarias, Jesús se hacía cada vez más famoso, y sus obras eran de muchísimo impacto para las aldeas que visitaba, pero también para sus propios discípulos.

¿Recuerdan cuando Jesús calma la tempestad? Según el relato de Lucas de este evento (8:22-25) los discípulos van a decir maravillados ¿Quien es este, que aun a los vientos y a las aguas manda, y le obedecen?

Luego de algún tiempito, de decir ¿Quién es este?, de comentar lo que la gente decía de él, llego ese dia, en el cual ellos pudieron ver claramente, con la asistencia divina, “este es el Cristo, el hijo del Dios viviente”.

Después de este evento, luego de que ellos recibieron esa revelación, es que Jesús va abrir el velo, y les va a contar cómo iba a traer salvación a los hombres, cual seria el plan para poder traer a pecadores, hacia ese Dios tres veces Santo.

Fin de introduccion.

Antes de introducirnos en los siguientes textos, quiero decirte a donde va apuntar este mensaje, que es lo que Dios quiere que volvamos a ver.

Son tres preguntas, una lleva a la otra, una es tan importante como la otra, son interrogantes que debemos hacernos para no vivir una vida equivocada, en cuanto a las prioridades de nuestra vida.

¿Qué evangelio estamos asimilando?

Es decir, que evangelio estamos aprendiendo, qué conocimiento tenemos acerca de esto. Qué premisas estamos adoptando y guardando en nuestra mente, en nuestro corazón.

En base a esta respuesta, vamos a poder contestar las otras dos.

¿Qué evangelio estamos viviendo? ¿Qué evangelio estamos predicando?

1

A medida que vayamos avanzando en los textos que analizaremos, quisiera que no pierdas de vista, estas tres preguntas que les acabo de hacer.

¿Qué evangelio estamos asimilando? Mateo 16:21

Marcos 8:31 Comenzó a enseñarles que le era necesario al Hijo del hombre padecer mucho, ser desechado por los ancianos, por los principales sacerdotes y por los escribas, ser muerto y resucitar después de tres días.

Imagínense por un momento las caras de los discípulos al empezar a escuchar estas palabras de su Cristo, de su Ungido, de su Mesías.
Hace un ratito, no mas, Pedro le había declarado esa gran verdad, una verdad que habrá traido muchisima alegria al corazon de cada uno de ellos, pero

¿A qué se debía verdaderamente esa alegría?

Me animo a decir esto, por lo que veremos más adelante con la reacción de Pedro, ellos les brotaba una alegría tremenda, porque pensaron en que finalmente este Jesucristo, los iba a liberar del imperio Romano, de la mano conquistadora de estos paganos, de estos incircuncisos, por fin serían libres, por fin tendrían al Rey de Reyes reinando con Justicia, paz y gozo en Jerusalén. Ahora ya no serían ellos los que llevarian dos millas la carga de los soldados romanos, sino al revés, por fin ellos serían los que podrían golpear las mejillas de los otros dos veces, etc.

Nos les paso alguna vez de que les dijeron que habría alguna posibilidad de cobrar un dinero por una herencia, un juicio, o lo que sea, pero nos les paso que antes de tenerla en la mano, se imagino en todas las cosas que iba hacer con ella? vamos a comprar esto y lo otro, nos vamos a ir de vacaciones, vamos a cambiar el auto, me voy a comprar el elíptico para llegar en línea al verano, pero luego resulta que no va a cobrar nada, por el momento, porque hay que esperar no se que tramite que tardaría unos 10 o 20 años? Va a cobrar, pero mas adelante, cual es su reacción a esto? No me la diga, me la imagino.

Bueno, algo asi les paso a los discípulos al escuchar estas tremendas, punzantes, dolorosas palabras para ellos, de Jesus.

De tocar el cielo con las manos, a tomar el pañuelo para secar sus lagrimas. Una terrible decepción acarició los corazones de los discípulos.

2

“era necesario para el Hijo del Hombre padecer mucho”.

Ellos no sabían, pero Jesús iba a sufrir la traición de uno de los doce, Judas iba a venderlo por unas miserables monedas de plata, ¿Cuanto valio esa amistad? 30 monedas de plata, ¿Cuanto valio esos tres años y medio de compania, de enseñanzas, de amor sincero? 30 monedas de plata.

Mateo 26:14 Entonces uno de los doce, que se llamaba Judas Iscariote, fue a los principales sacerdotes
Mat 26:15 y les dijo: «¿Qué me queréis dar, y yo os lo entregaré?
Ellos le asignaron treinta piezas de plata».[j]

Mat 26:16 Desde entonces buscaba oportunidad para entregarlo.

Qué sensaciones tendría Jesús en su corazón, al saber que Judas, tuvendo la oportunidad de estar cerquísima del Hijo de Dios, del Creador del Universo, del Amor verdadero, prefirió elegir la codicia, prefirió la oscuridad antes que la luz, imaginense el dolor en el interior de Jesús, al saber que cada vez que Judas se acercaba, no era para saber más de él, no era para recibir un abrazo profundo de amor, sino para ver cual seria el mejor momento para entregarlo en manos de los líderes religiosos.

“Era necesario para Jesús padecer mucho”

Algo similar pasó con uno de sus más íntimo, Pedro, aquel que le dijo que era el Cristo, aquel que participó de la transfiguración, a aquel que llevo para que lo sostuviera en oración oras antes de morir, en el Getsemaní, ese mismo que compartió momentos únicos y preciosos, lo negó tres veces, luego de que le dijera que iba a dar su vida por el.

Mat 26:75 Entonces Pedro se acordó de las palabras que Jesús le había dicho: «Antes que cante el gallo, me negarás tres veces».
[p] Y saliendo fuera, lloró amargamente.

Jesús tuvo que soportar el rechazo, no solo de los ancianos, de los principales sacerdotes, de los escribas, sino de su propia familia.

Juan 7:1 Después de esto andaba Jesús en Galilea, pues no quería andar en Judea, porque los judíos[a] intentaban matarlo.
Jua 7:2 Estaba cerca la fiesta de los judíos, la de los Tabernáculos,[b]
Jua 7:3 y le dijeron sus hermanos:[c]

3

–Sal de aquí, y vete a Judea, para que también tus discípulos vean las obras que haces,
Jua 7:4 porque ninguno que procura darse a conocer hace algo en secreto. Si estas cosas haces, manifiéstate al mundo.

Jua 7:5 Ni aun sus hermanos creían en él.

Los hermanos de Jesús dudan profundamente de su ministerio, con otras palabras le están diciendo, vos que queres hacerte famoso, vaya uno a saber con que motivación, no te tenes que esconder en Galilea, un lugar lejano al centro religioso judío, sino que tenes que hacerte ver en los lugares públicos.

Ellos estaban escépticos a lo que Jesús afirmaba ser.
No le creían ni los de su propia familia, excepto María, que había recibido el mensaje divino por medio del ángel Gabriel.

Mateo 10:34 No penséis que he venido a traer paz a la tierra; no he venido a traer paz, sino espada,[b]
Mat 10:35 porque he venido a poner en enemistad al hombre contra su padre, a la hija contra su madre y a la nuera contra su suegra.

Mat 10:36 Así que los enemigos del hombre serán los de su casa.

¿Qué evangelio estamos asimilando? ¿Qué evangelio estamos predicando?

Veni a Jesús y toda tu familia va apoyar tu transformación? Veni a Jesús y todos tus problemas se te van a solucionar? Veni a Jesús y todo va hacer felicidad, alegria, sonrisa?

No fue exactamente lo que Jesús dijo, no fue precisamente lo que Jesús experimentó en la tierra.

Por este motivo, es relevante que podamos asimilar el verdadero evangelio, es necesario comprender las demandas que Jesucristo nos planteó, para poder vivir en el evangelio correcto.

Jesús les va a decir a sus discípulos, ojo muchachos que les falta una parte de la historia, y es la que les tengo que contar ahora que comprenden espiritualmente quién soy yo verdaderamente.

Porque antes de resucitar, primero hay que morir.

Juan 12:24 De cierto, de cierto os digo que si el grano de trigo que cae en la tierra no muere, queda solo, pero si muere, lleva mucho fruto.

4

Luego de que el Señor dijera a sus discípulos que le era necesario padecer, morir y resucitar al tercer día, Pedro, el líder, el impulsivo del equipo va a tomar la palabra.

Mateo 16:22 Entonces Pedro, tomándolo aparte, comenzó a reconvenirlo, diciendo:
–Señor, ten compasión de ti mismo. ¡En ninguna manera esto te acontezca!

Pedro cuando escucha esas palabras de Jesús, no lo puede entender, el tenia en su cabeza la estructura religiosa judía, que hablaba solo del Mesías Libertador, del Mesías Rey, del Mesías Poderoso, pero no tenía presente al Mesías sufriente, al Cordero de Dios, al Mesías que describe perfectamente Isaías en el capítulo 53.

Él había asimilado solo una parte de la historia, y no quería saber nada con la otra. Tal fue la desesperación que hace algo totalmente fuera de lugar, lo va a tomar a Jesús aparte y le va a decir: “Jesús estás completamente loco”!!! “No estás pensando claramente, te estas olvidando de lo que viniste hacer”, es increíble la valentía y a la vez el descaro de Pedro, al querer aconsejarle o mejor dicho corregir los planes de Jesus, el Mesias, el Ungido, el Elegido de Dios.

Lo primero que dice es “ten compasión de ti mismo”, algo totalmente contrario a lo que Jesús iba a decir más adelante, algo totalmente distinto a lo que es el evangelio, nada tiene que ver el evangelio con ponerse en primer lugar uno antes que a Dios y sus planes.

Por eso es tan importante preguntarnos qué tipo de evangelio estamos guardando en nuestro corazon, que clase de evangelio estamos viviendo.

Y no porque hayan dos evangelios, formuló la pregunta de esa manera para que pensemos, pero hay tan solo un verdadero evangelio, y es el que Cristo nos enseñó no solo con sus palabras, sino con su propia vida.

Esa frase que Pedro le dice a Jesús, “ten compasion de vos mismo” es algo que está en el corazón de todos los hombres, incluso en aquellos redimidos del Señor.

Cuando nuestros interes personales toman preponderancia en nuestra vida, cuando las motivaciones al servir en la iglesia o fuera de ella son solo para elevar nuestro ego, para llenar el vacío, para realizarnos como personas, para sentirnos bien, completos, no estamos viviendo el evangelio. Solo nos estamos compadeciendo de nosotros mismos.

5

Cuando el amor por mi mismo, excede el amor por el prójimo, estamos asimilando otra cosa, menos el evangelio.

Pero cuando no estamos viviendo ese evangelio que Jesús nos plantea una y otra vez,, tenemos que estar dispuestos a escuchar las mismas palabras que el Salvador le dijo a Pedro.

Mat 16:23 Pero él, volviéndose, dijo a Pedro:
–¡Quítate de delante de mí, Satanás![r] Me eres tropiezo, porque no pones la mira en las cosas de Dios, sino en las de los hombres.

Yo no se vos, pero no quiero escuchar otra vez estas palabras de la boca de Jesús.

Pero Cuando no tomamos en serio el evangelio, cuando vivimos para nosotros mismos, cuando nos amoldamos al sistema de este mundo, y queremos introducir cosas extrañas al evangelio, lamentablemente vamos a escuchar estas mismas palabras pero ya no dirigidas a Pedro, sino a nosotros.

Cuando digo introducir cosas extrañas al evangelio, no me refiero a una herejía dicha desde alguna plataforma de enseñanza, sino querer acomodar el evangelio a nuestra vida, a nuestras comodidades, a nuestro dinero, a nuestra familia, cuando tendria q ser al revés, nosotros amoldarnos al evangelio que Cristo anunció.

“Señor yo tengo todo esto y me manejaba de esta manera, pero ya no quiero vivir así, sino quiero que tomes el control de todo, mi familia, mis recursos, el trabajo, porque entiendo que todo te lo debo a vos, porque entiendo que vos te diste por completo por amor a nosotros”

Somos de tropiezo a los planes de Dios cuando no vivimos el evangelio, porque no dejamos que su espíritu santo nos gobierne, porque empezamos a darle lugar a cosas que no le agradan, porque Cristo pasa a un segundo plano en nuestras vidas, porque en vez de poner nuestra mirada en las cosas de Dios, en esas que son eternas,en esas que son para siempre, indefectiblemente bajamos la mirada a las cosas de los hombres.

6

Mateo 16:24 Entonces Jesús dijo a sus discípulos.

Marcos 8:34 Y llamando a la gente y a sus discípulos, les dijo:
–Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame.

Queridos hermanos y hermanas, amigo que venís por primera vez, quiero decirte que el evangelio, tiene que ver con morir, con negarse a uno mismo, con sufrimiento, con padecimiento, pero también con gozo, con paz, con esperanza, con amor.

Pero primero debemos morir, para que Cristo viva en nosotros.

Jesús ya ahora no solo les va a hablar a sus discípulos, a sus íntimos, sino que va a llamar a todas las gentes, a aquellos que comieron de ese pan milagroso, a aquellos que sano físicamente, ​a todos y les va a predicar el mensaje más pesimista que jamás alguien haya escuchado.

Jesús va a decir, todos aquellos que quieran estar detrás mio, quieren transitar mi mismo camino, deben negarse a sí mismo. ¿Que quiere decir esto?
Él estaba tratando de decir con esa frase, que aquellos que quieran seguirlo a partir de ahora deben reconocer que no hay nada en ellos que puede acercarlos a Dios, al contrario, que todo lo que hay en uno lo aleja de la presencia de Dios.

El negarnos a nosotros mismo tiene que ver con arrepentimiento, con un dolor en lo profundo del corazón por haber elegido mal, por haberle dado la espalda a Dios y correr en la misma sintonía que este mundo.

Negarnos a nosotros mismos, es morir a nuestro yo, a nuestro egoísmo, a nuestros planes, y poner los propósitos de Dios en primer lugar.
Es estimar todo lo que tenemos por basura, en comparación con el conocimiento de Cristo, tal como lo hizo y lo dijo el apóstol Pablo.

Si nuestra seguridad está en nuestra intelectualidad, en nuestros ahorros, en nuestro poder adquisitivo, en nuestros contactos, en nuestro status, lamentablemente no estamos viviendo el verdadero evangelio.
EL negarnos a nosotros mismos tiene que ver con esto, en poner nuestra mirada, nuestra confianza ya no en nosotros, que no somos nada, que estamos en banca rota, y en lo que podamos conseguir, sino en Cristo.

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Negarse a uno mismo, es hacer lo que hizo Jesús en Getsemaní, cuando le rogaba al Padre, si habria algun otro camino para traer salvación al hombre que no sea la cruz, pero que al final de su petición El decia, no se haga mi voluntad, sino la tuya.

Negarse a uno mismo es seguir las pisadas de Jesús, cuando luego de recibir una noticia triste como la muerte de su primo, Juan el bautista, en medio de un momento de dolor, quizás de duelo, de reflexión, al venir las multitudes tuvo compasión por ellas, el dejo eso a un lado y sanó a todos aquellos que estaban enfermos.

Negarse a uno mismo, es seguir el ejemplo de Jesús cuando estaba colgado en la cruz, y la gente, quizás esa misma que él había sanado, que él había alimentado, le gritaba cosas horrendas, le insultaba, arengaba para que muriera, y de su boca solo salieron palabras de perdón, de gracia, de misericordia.

“Nieguese a si mismo, tome su cruz cada día”

Mi cruz no es ni mi suegra, ni mi mujer, ni ninguna otra persona que me complique la vida.

La frase tome su cruz, tiene la implicancia en el contexto en el cual fue dicho.
Que pasaba en la cruz en aquel tiempo? La gente moria, es como decir hoy la silla eléctrica, o en su momento la guillotina,
Lo que Jesús sencillamente estaba diciendo, es que el que lo quiera seguir, tiene que estar dispuesto a morir, no un día específico, sino todos los días tiene que estar con esa disposición, por eso primero va a decir que debemos negarnos a nosotros mismo, y luego tomar la cruz.
Nadie que primero no se niegue a sus propios intereses, puede estar dispuesto a morir.

Esto mismo pero de otras maneras Jesús va anunciar a sus discípulos, porque sabía lo que tendrían que pasar más adelante.
Jesús faltaría a la verdad si solo les mostraba milagros, sanidades, prodigios y no les dijera las demandas del evangelio, lo que deberían sufrir por causa de El.

Hoy en día, muchos de nuestro hermanos en diferentes países del mundo sufren la muerte por causa de Jesucristo y el evangelio, sufren el destierro, el robo de sus bienes, y aun asi siguen adelante, firmes en la fe.

Siempre decimos que en nuestro país la vida no corre peligro por seguir a Jesús, pero hoy estamos notando la persecución religiosa, hoy un chico o una chica que lleva un pañuelo celeste es discriminado, es insultado, es amedrentado por sus

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ideales, por sus principios, y hoy quizás sea eso nuestra cruz, el ser expuesto a los insultos, a la degradación, por levantar el nombre de Jesús en alto y sus valores.

¿Qué evangelio estamos asimilando? ¿Qué evangelio estamos viviendo?

Faltaría a la verdad, y me mentiría a mi mismo, si solo les dijera las cosas lindas, positivas del evangelio, ahora si alguien me escucha decir esto fuera del contexto en el cual estamos hablando, me podria decir, “pero si el evangelio es una buena noticia, ​¿no sería una contradicción decir que tiene cosas negativas”?

Esto es un excelente planteo.

La buena noticia es toda de parte de Dios. Y esta es que El, se acercó al hombre por medio de su Hijo Jesús, el cual se entregó a si mismo para morir en nuestro lugar, para pagar toda nuestra deuda, para limpiarnos de todo pecado, por medio de su preciosa y poderosa sangre, el justo por los injustos, el rico por los pobres, el santo por los pecadores.

Y al tercer dia resucito, afirmando que la muerte no puede detener el plan de Dios, dándonos a conocer que hay vida eterna luego de esta vida terrenal.

Esa es la buena noticia, que a su vez para los que creen trae consigo ciertas situaciones adversas, porque al mirar a Dios, estamos dándole la espalda al sistema diabólico de este mundo, que enaltece todo lo que va en contra de los principios de Dios establecidos en su palabra.
Pero aun asi, a esas circunstancias adversas, vale aclarar, solo momentáneas que nos toca pasar, Dios las utiliza para bendición nuestra, para crecer, para madurar, para que le conozcamos de una manera mejor.

Repito, esas situaciones difíciles, tales como las que vivió Jesús en esta tierra, son momentáneas, solo duran en esta tierra, comparadas a las bendiciones eternas que Dios nos tiene preparada no son nada.

Por eso el escritor de Hebreos:

Heb 12:2 puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio,[d] y se sentó a la diestra del trono de Dios.

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Jesús puso el gozo delante de la cruz, Jesús nos miró a nosotros en el cielo, disfrutando de la presencia del Padre y dijo, me niego a mi mismo y tomo mi cruz. Jesús puso el gozo del Padre, al ver que la deuda que generó el hombre fue salda en la vida de su Hijo Jesucristo.

Menospreciando el oprobio, el maltrato, la vergüenza, la injusticia, etc. etc. etc. NEGACIÓN, MUERTE A SUS PROPIOS INTERES.

¿Cuanto tiempo sufrió Jesús en esta tierra? ¿Cuánto tiempo estuvo colgado en la cruz? ¿Cuantas horas fue azotado por los romanos? ¿Cuanto? ¿Cuanto?

Apocalipsis 4:8 Los cuatro seres vivientes tenían cada uno seis alas, y alrededor y por dentro estaban llenos de ojos,[m] y día y noche, sin cesar, decían:
«¡Santo, santo, santo es el Señor

Dios Todopoderoso,[n]
el que era, el que es y el que ha de venir!».

Apo 4:9 Cada vez que aquellos seres vivientes dan gloria y honra y acción de gracias al que está sentado en el trono, al que vive por los siglos de los siglos, Apo 4:10 los veinticuatro ancianos se postran delante del que está sentado en el trono y adoran al que vive por los siglos de los siglos, y echan sus coronas delante del trono, diciendo:

Apo 4:11 «Señor, digno eres
de recibir la gloria, la honra y el poder,[ñ] porque tú creaste todas las cosas,
y por tu voluntad existen y fueron creadas».[o]

¿Cuánto tiempo estuvo colgado Jesús en la cruz? ¿Cuanto?

Mar 8:35 Todo el que quiera salvar su vida, la perderá; y todo el que pierda su vida por causa de mí y del evangelio, la salvará,

Ahora Jesús está sentado en el trono por los siglos de los siglos, recibiendo adoración celestial!!

Todo lo que vivamos en esta tierra, no tiene comparación con las bendiciones eternas que viviremos en los cielos con nuestro Padre Celestial y nuestro Señor Jesucristo.

Jesús abrió el camino, debemos seguirle.

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Su ejemplo. su vida, su muerte, su resurrección, son nuestra garantía de que sus palabras son fieles y verdaderas, vale la pena jugársela por esta causa.
Vale la pena gastarse por completo por Jesús.
Le hemos dado tanta vida a muchas otras causas, como no dársela a aquel que tomó nuestro lugar en la cruz.

Gastar el tiempo, los recursos, todo lo que tengamos a nuestro alcance para que otras personas puedan conocer y disfrutar del amor de Dios.

¿Qué evangelio estamos asimilando? ¿Qué evangelio estamos viviendo? ¿Qué evangelio estamos predicando?

Si nuestra vida y predicación, exalta a Jesucristo, estamos por el buen camino.

Mar 8:35 Todo el que quiera salvar su vida, la perderá; y todo el que pierda su vida por causa de mí y del evangelio, la salvará,

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